Artículo Periodístico 4.134º: “¡Cuánto ha cambiado la vida el móvil…!”.
Nadie duda lo que ha cambiado la
vida normal y real y social el móvil, pero supongo que pocos saben, si es que
el saber humano conoce cuánto va cambiando el cerebro.
El
móvil es una parte de todo un cambio revolucionario de la informática y la
teleinformática. No es semejante al cuchillo y todas sus derivaciones, buenas o
menos buenas, ni siquiera a la rueda, y todas las aplicaciones a lo largo de
los milenios, no. Es más parecido al fuego, y, todas sus consecuencias. El
fuego cambió la realidad de los humanos, de la especie que empezó a utilizarlo,
quizás se descubrió y perdió varias veces a lo largo de los milenios. Sino que
el fuego cambió todo, incluso, posiblemente, dicen algunos antropólogos el
sistema de conexión neuronal humano. Es más, algunos indican que es un factor o
causa esencial, no única, de la evolución humana, de una especie a otra… Al
final, la bomba atómica es una manera y evolución del fuego…
Pero
el móvil, indicábamos, es una parte de todo un sistema de cambios, la
informática y la teleinformática. La IA es una partecita de todo ese tinglado y
todo el mundo, ahora está asustado con las consecuencias que tendrá, las
derivaciones que se harán. Y, la informática cuántica, que tantas esperanzas se
tienen, y, tantos temores también. Es como una enorme ola o conjuntos de olas,
producidas por seísmos sucesivos. Y, nadie, nadie sabe lo que sucederá, nadie
sabe, ni siquiera todas las consecuencias que tendrá. Nadie conoce las
consecuencias del móvil, pero no solo a nivel social, político, económico,
religioso, cultural, pero tampoco a nivel de sinapsis neuronal. Porque el fuego
cambió el cerebro, y, modestamente creo, que los sistemas informáticos
cambiarán también el cerebro. Poco a poco, quizás no seamos conscientes…
A
veces, cuándo uno, en un silencio en el sillón o en un medio silencio caminando
por la calle, uno le viene de dentro una pregunta, y, uno no sabe contestarla,
porque quizás, nadie sepa responderla, pero tiene muchas variedades, pero una
de ellas, es la siguiente: ¿Cuándo los sistemas informáticos, sean cómo sean,
tengan el hardware que dispongan, sean capaces de inventar matemáticas, crear
mundos matemáticos, solucionar problemas matemáticos, inventar nuevos problemas
matemáticos… qué va a suceder…? ¿Cuándo esto suceda, y, sucederá, aunque no sé,
si dentro de diez o cien años, qué va a suceder…?
El
móvil, siendo esencial, es un pequeño cambio entre muchos, es una pequeña
pieza-tesela en el mosaico de la realidad humana. Estamos ya mirando como
empezar a caminar por el sistema solar, supongo que a finales del siglo que
viene, ya estarán en las fronteras de haber caminado por una gran parte de la
galaxia. El móvil es un trozo de hierba ardiendo, que es como la precursora del
fuego de la bomba atómica. Todavía no sabemos todos los cambios que sucederán y
acontecerán. No sabemos… Pero todo está cambiando, todo cambiará. Cuándo se
descubrió América, se sabía que todo había cambiado, pero no conocían en
cuantos campos y cuántas realidades… De ser descubridores y conquistados los
europeos en el siglo quince-dieciséis, en el siglo veinte, quién gestionaba el
mundo, en la segunda mitad, era una potencia nacida en América. Alguien podría
haber imaginado eso hace cuatro siglos…
Algunos
indican, un sistema informático global, o aplicado a un territorio equis, un
sistema de IA superavanzado, que esté conectado a millones de millones de
receptores, cuántos datos podrá amasar o conocer o controlar o acumular o
guardar… Quizás, ahora, el reto sea cómo conservar tantos billones de datos de
información. Que cada emisor realiza, desde un móvil atado a una persona, a una
tablet, a un ordenador o a una llamada telefónica. Da lo mismo. Ahora, el
concepto de “móvil”, es todo, porque al final, que es un móvil sino un
ordenador en miniatura… Que es un ordenador sino un móvil que ha crecido un
poco, como si fuese un gato grande…
Caminas
por la calle, te cruzas con diez personas, la mitad van hablando o van
escribiendo con ese artilugio que hemos denominado telefonía móvil o en
movimiento. Si quieren saber de alguien todo o casi todo, la sociedad ha
alcanzado un poder que lo puede hacer. Pueden saber, si es que quieren o
desean, dónde va usted, o en qué direcciones, cuánto tiempo está su móvil con
usted en qué lugar, con qué personas con otros móviles se ha cruzado, a quién y
con quién habla, qué horas lo tiene abierto y qué horas cerrado, qué mira en el
mundo selvático de Internet, si usted lee este artículo o no…
Si
además eso se une y se junta toda esa información, con las cámaras que existen
en cualquier lugar, que por un lado, produce más seguridad y por otra, captan
más información sobre todos y sobre usted. Y, si además se une a los cientos de
bases de datos, que usted va dejando, sea en la banca, sea en la escuela, sea
en la conducción de su vehículo, sea en su declaración de la renta, sea en su
trabajo, sea en el gasto de luz, sea en mil cosas que ha comprado en un año en
el mundo real, sea en sus vacaciones…
Si
todo eso se une y se combina. Si algún poder desea saber y conocer lo que usted
hace y lo que usted es. No dude, que sabrán más de usted sobre usted, que usted
mismo sobre usted. Esta es la realidad. Solo nos cabe como respuesta, el
silencio, y escribir pequeños artículos periodísticos que también entrarán en
esa cueva del móvil y de Internet y de la informática. Paz y bien.
http://articulosperiodisticosjmm.blogspot.com.es © jmm caminero (15 marzo-01 abril 24 cr).
Fin artículo 4.134º:
“¡Cuánto ha cambiado la vida el
móvil…!”.
E.
01 abril