Artículo Periodístico 467º: “Sobre el mal”[1].
0. Todo ser humano se
pregunta sobre el bien moral y el mal moral. Diríamos que este es un tema
eterno, y hasta dónde sabemos desde la noche de los tiempos… ¿la cuestión es si
podríamos aclarar un poco, aunque sea muy sucintamente y en un esquema muy
simple sobre el problema del mal…? ¿La cuestión es si podríamos alcanzar unos
conocimientos más precisos dentro de la enorme complejidad de este problema?
1. El mal y el bien
tienen distintas perspectivas, vertientes, áreas, dimensiones, concepciones,
aristas, etc.
Partimos del hecho que
todo ser humano, sea de un tiempo o de otro, de una época o de otra, de una
cultura o de otra, de una edad o de otra se pregunta y analiza y enjuicia, sus
actos y sus deseos y sus acciones y sus emociones, y también la de los demás…
Diríamos que el problema del bien y del mal es una cuestión eterna…
Por otro lado, en el
siglo veinte, el ser humano a nivel individual, o el ser humano en
colectividad, o el ser humano individual o en colectividad bajo el paraguas de
una bandera o una ideología ha hecho verdaderas crueldades, que no somos
capaces de superar y de entender y de comprender. Y que pasan las décadas y no
podemos comprender, ni entender…
Parece que el ser
humano, se salve quién se salve, en general, tiene un mar interior lleno de
bondad, pero también lleva dentro de sí un volcán lleno de dolor y crueldad y
sufrimiento y angustia y pena y desaliento y violencia sin sentido…
Por lo cual parece que
todo ser humano está en una lucha constante, consigo mismo, para ir dejando que
crezca el bien dentro de si y se proyecte fuera de sí, y una lucha constante
consigo mismo para poner límites a su mal y que éste no salga fuera de si
mismo…
Quizás en estos temas
hay mucha ignorancia, más de la que pensamos, más ahora, que la mayoría de la
población no tiene suficiente formación ética y moral, y tampoco religiosa o
ética religiosa mínima, a nivel teórico. Se salve quién se salve.
A menos moralidad
correcta, todo individuo sufre más, toda la familia del individuo también más,
la sociedad y las colectividades que forman la sociedad también, y posiblemente
el Estado se debilita aún más…
2. Definiciones posibles
del mal.
a) El mal o lo malo
puede utilizarse como substantivo o como adjetivo.
b) Puede estudiarse el
problema del mal, desde las ciencias sociales, y sería un concepto relativo a
esos puntos de vista; o desde el punto de vista moral o ético; o desde la
perspectiva metafísica u ontológica.
c) algunos piensan que
los males relativos o personales dependen de un mal real general.
3. Teorías sobre el mal:
a) El mal no es una
realidad separada o separable: forma parte de la única realidad verdaderamente
existente (monismo), aunque sea lo que hay de menos real dentro de lo real.
Esto sería el mal metafísico, aunque se puede presentar como mal físico o mal
moral.
b) El mal forma parte de
la realidad, porque sin él la realidad sería incompleta, el mal como un
elemento necesario para la armonía universal. Esto lo defienden los estoicos.
c) El mal es el último
grado del ser. Esta pobreza ontológica del mal es presentada habitualmente
adscribiendo al mal todos los valores negativos o estimados negativos
imaginables: ilimitación indeterminación, dependencia, pasividad, temporalidad,
inestabilidad, materialidad, etc.
d) El mal forma parte de
lo real, pero como una entidad que opera dinámicamente y contribuye al
desenvolvimiento lógico-metafísico de lo que hay. Es el caso de Hegel.
e) El mal es el
sacrifico que ejecuta una parte en beneficio del todo. Max Scheler defiende
esta posición.
f) El mal es una falta
completa de realidad, es pura y simplemente el no ser.
g) El mal es una
apariencia, una ilusión, un velo que impide la visión del bien, identificado
con el ser.
h) El mal se trata de
una privación determinado. (Pueden existir diferentes variedades del concepto o
realidad de la privación, cuando varias subteorías).
i) Teorías del dualismo
radical, es decir, un dualismo basado en la suposición de que los dos
principios radicalmente opuestos que
existen en el universo: el del Bien y el del Mal.
Otras teorías sobre el
mal de carácter muy general.
j) El optimismo.
k) El pesimismo.
l) El meliorismo, tanto
en la forma de progresismo teórico como en la de la acción contra el mal
efectivo y concreto. Voltaire.
m) El dualismo, según el
cual el mal posee una cierta substancialidad y hasta en ocasiones es
personificado y que por lo común termina por suponer que el bien triunfará
sobre el mal.
5. El problema del
origen del mal.
a) el mal procede
últimamente de Dios o de la
Causa primera.
b) el mal tiene su
origen en el hombre o en ciertas de sus actividades.
c) El mal es
consecuencia del azar.
d) El mal nace en la Naturaleza.
e) El mal nace de la
materia.
f) El origen es otras
fuentes.
g) Una combinación de
las anteriores causas.
6. Distinguir entre el
bien físico y el mal moral.
El primero es
equivalente al sufrimiento o al dolor, el segundo es un tipo de padecer que no
se identifica con el físico, aun cuando quien lo experimenta no se vea librado
del mal físico, de ciertas alteraciones físicas.
A veces el mal moral es
identificado con el pecado.
Leibniz dividió el mal
en tres tipos: metafísico, físico y moral.
Otros autores señalarían
tres tipos de males: el mal físico o de la naturaleza, el más humano o mal
moral; tercero, el mal religioso o pecado.
7. El mal plantea el
problema de cómo el hombre puede enfrentarse a él.
a)
La aceptación alegre del mal, o mejor, la actitud que encuentra en el mal
físico o moral una especie de satisfacción o complacencia. Tal actitud recibe
el nombre de algofilia (amor al mal o a los males).
b) La aceptación
resignada.
c) La desesperación.
d) La huida.
e) La adhesión. Esta
actitud es muy excepcional, puede manifestarse cuando se supone, como ocurre
entre los maniqueos, que hay una lucha entre las potencias del bien y las del
mal. Cuando se admite que las fuerzas del mal son más poderosas que las
primera, se puede asimismo declarar que lo mejor s plegarse a ellas, o si se
quiere, reconciliarse con ellas.
f) La acción.
g) buscan que función
tiene el mal en la organización del universo. Este problema surge si admitimos
la infinita misericordia de Dios, cómo es que permite el mal, y por tanto, qué
función o finalidad tiene el mal en la vida y en la economía de la salvación.
8. En enero, si no
recuerdo mal se celebra o se recuerda el día de la shoah o del holocausto. Un
día que la Unesco y la Onu nos recuerda en conmemoración de las victimas,
millones de personas muertas en los campos de exterminios, millones de judíos,
millones de otras personas de otras ideologías, etnias, condiciones sociales o
psicológicas…
¿Pasarán siglos, si es
que antes no repetimos otras acciones del mismo estilo o incluso más
amplificadas, y no seremos capaces de entender el mal y la maldad que el ser
humano, a veces hace o piensa o siente o desea o quiere o realiza o hace o
construye o diseña…?
¿No podemos decir, que
todos los seres humanos hagan esas acciones, posiblemente solo sea suficiente
con un uno por ciento de la población, que dirigen y gestionan esas industrias
del mal, realizadas en el siglo veinte, y en otros siglos, en todos los
continentes, y no solo en Europa, y los demás, el resto de la población, por
miedo o temor callan…?
¿Dentro de la filosofía
el mal diríamos que tiene varios orígenes siguiendo a Leibniz, el mal físico o
natural o de la naturaleza, el mal moral o del ser humano, y el cristianismo
añade el mal sufrido por el ser humano por la tentación del maligno…?
9. Para terminar y dar
siempre un aliento de esperanza, el Yad Vashem, que es diríamos un organismo
del pueblo judío que estudia el problema del holocausto, también, si no
recuerdo mal, estudia y analiza lo que llaman más o menos “no judíos justos o
gentiles justos”. Es decir, personas que ayudaron al pueblo o a personas
judías, para salvarles del mal, salvarles de la muerte, salvarles del
exterminio. Y es reconfortante que en esa locura o vorágine de los campos de
exterminio y de esa ideología que propició y organizó y gestionó ese mal, dicha
organización creo que hasta hace unos años tenía la ficha y el nombre de unos
“veinticinco mil no judíos o gentiles justos o justos de las naciones”. Esto a
mi entender es importante, en una situación de locura colectiva en Europa, con
una guerra mundial, como jamás hemos conocido los seres humanos, hubo al menos
veinticinco mil personas, personas no judías que intentaron ayudar a judíos.
Posiblemente habrá habido más, posiblemente existirán otras que se han olvidado
sus nombres, y que intentaron ayudar no solo a judíos, sino a otras personas
con otras ideologías, etnias, lenguas, culturas, etc.
Si olvidamos que existe
el mal, es más fácil que lo repitamos, como diría Peguy y Blondel. Cambiarán
las personas, cambiarán las banderas, cambiarán las circunstancias pero
volveremos a hacer el mal. Esta es la cuestión. Si usted o yo hubiésemos nacido
langosta o ballena o águila o molusco o mosca quizás no nos tendríamos que
plantear el problema del mal, ni del bien, pero como usted supongo que es un
bípedo implume racional, igual que yo, pues tiene que llevar sobre sí, el peso
y el espejo del libre albedrío, de la voluntad, de la libertad, del bien y del
menos bien… Buen día…
©
jmm caminero (23 enero-13 febrero 2016 cr).
Fin artículo 467º:
“Sobre el mal”.
*
[1]
Enviado y publicado el día
13 de febrero del 2016 al MiCiudadReal.es
Enviado
y publicado el día 15 de febrero del 2016 a Noticanarias.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.