Artículo Periodístico 150º: “Hipótesis posibles para encontrar soluciones a la crisis actual del liberalismo democrático y del socialismo democrático, I”[1].
0.
¿Se puede decir que hoy, en el siglo veintiuno, algunos de los fundamentos o de
las prácticas tanto del socialismo democrático y del liberalismo democrático
están obsoletas, o deben ser matizadas? ¿Teniendo en cuenta la acumulación del
saber acaecida en este último siglo, y teniendo en cuenta, la realidad concreta
y práctica y real del mundo actual que ya es un mundo globalizado…?
1.
Partimos del hecho que las sociedades occidentales democráticas, se basan en
varios fundamentos, entre otros, en la democracia, en los derechos humanos, y
en un sistema alternativo, en el cual, el carro de la organización social y
política, está dirigido por dos ejes o por dos ruedas, que se complementan, lo
que se ha denominado los liberalismos democráticos y los socialismos
democráticos. Y ambos son las dos caras de una misma moneda. O si se quiere el
sistema de gestión y adecuación de la realidad a la misma realidad.
2.
Que existe un problema irresoluble, hasta ahora, al menos teóricamente, desde
la Ilustración y las revoluciones francesas, americanas y parlamentarias
inglesas y pasando por todas las revoluciones del siglo diecinueve y veinte,
que es cómo armonizar los ideales de “libertad y de igualdad”. Es decir, si
admitimos la libertad, la libertad se expresa en multitud de órdenes y de
realidades, y si admitimos la igualdad, ésta también se expresa en multitud de
campos y de materias. Armonizar ambos conceptos o conjuntos de conceptos, nos
guste o disguste, es un problema teórico, que por el momento, nadie, que yo
sepa ha resuelto. Y muchos problemas de funcionamiento práctico, en última
instancia tienen su raíz en esta cuestión. La tolerancia, junto con la igualdad
y la libertad ante la ley es la solución dada durante décadas ante este
problema de fundamentación, y es diríamos la mejor opción que se ha encontrado
hasta el momento.
3.
Por lo cual, ambas ideologías y sistemas teóricos prácticos, deben irse
amoldando a la realidades concretas, pero al mismo tiempo, deben ir buscando
nuevas fundamentaciones, nuevas matizaciones de sus principios generales, etc.
Ni
se puede estar en una situación inamovible, en principios o en prácticas,
basado en un siglo o más, ni tampoco se puede estar en un constante cambio.
Sino buscar sistemas de reciprocidad, de armonía o de equilibrio entre dos
extremos.
4.
Si se admiten las anteriores hipótesis, nos lleva a presentar un panorama
ideológico y práctico diferente. O dicho de otra manera. Las personas que
gestionan esos programas y esas ideologías, son personas que aunque tengan
distintas ideologías deben saber que colaboran con el bien común. Es como la corriente
alterna. Es decir, ambas organizaciones ideológicas, y por tanto, sociales y
políticas se necesitan. Es decir, la tolerancia ante el otro debe ser más
profunda en la concepción propia de la propia mismidad.
5.
Primero, que tengan las personas y los ideólogos de esos movimientos, una
voluntad clara y evidente de que el otro, el otro puede ser necesario para el
propio desarrollo. O dicho de otro modo, que los liberalismos son necesarios
para los socialismos democráticos y viceversa.
6.
Enseñar al pueblo, a las mayorías la verdad y la verdad de la realidad. Que
ningún sistema político y social es santa Claus o los Reyes Magos, que todos
los sistemas tienen defectos, y que éstos se nutren de la propia realidad
social y humana. No se puede prometer lo que no es científicamente correcto, ni
es prudente. Al pueblo se le ha enseñado o el pueblo se ha creído que todo es
posible…
7.
Al pueblo hay que enseñarle, que a todo individuo sano y adulto, debe además de
ocuparse de su familia y de si mismo buscar un trabajo remunerado, y si no
encuentra dicha realidad, y al mismo tiempo entrar en sistemas de formación y
educación reglados y no reglados. Que es un deber hacia si mismo, hacia su
familia, hacia la sociedad, hacia el Estado.
8.
Enseñar al pueblo, sin demagogias, con realismo social y político, con
prudencia. Que los derechos dependen y son consecuencias de los deberes y
obligaciones, y los deberes de los derechos… que ambas realidades van unidas.
No hay derechos sin deberes, ni deberes sin derechos.
9.
Que las elites y las minorías de todas las clases y formas y grupos, tienen sus
derechos, pero también sus deberes.
Que
las elites que rigen sociedades, países, economías, culturas, religiones tienen
una enorme responsabilidad ante el bien común y ante el bien general. Que deben
utilizar su poder con prudencia y racionalidad y sentido común y según el saber
ortodoxo de cada momento…
10.
Que las elites no pueden gobernar y gestionar sin tener en cuenta al pueblo y a
las mayorías y las minorías, y que los pueblos deben ser conscientes, que
necesitan a las elites que gobiernan y que gestionan a la sociedad…
11.
Que las elites de los distintos grupos ideológicos, y sus afiliados o sus
clientelas sociales y políticas deben ser conscientes de sus diferencias, pero
aún más de sus no diferencias, de sus identidades, de sus puntos similares… Que
demasiadas veces se incrementan y se incentivan enormemente las diferencias y
se infravaloran sus similitudes…
Que
hay que ser conscientes que las diferencias pueden hacer que el motor de la
sociedad siga funcionando, pero incrementar o agravar en demasía dichas
diferencias puedan provocar errores de funcionamiento de la maquinaria social y
política y económica. Que un poco de algo es bueno, pero que mucho es negativo…
un poco de aceite entre las piezas hace funcionar un mecanismo, mucho aceite lo
atosiga y le impide el funcionamiento, un poco de sal o de vinagre es bueno
para el conjunto de la comida, mucha sal o vinagre hace inviable la
degustación.
12.
¿Que hay que ser conscientes que los liberalismos y socialismos democráticos
pueden ser barridos por radicalismos ideológicos y políticos de distinto
perfil, en el interior de las sociedades y de esos Estados, segundo, que
también debido a otras ideologías y otras culturas y otras religiones y otras
economías y otras sociedades y otras presiones demográficas y otros Estados, y
en tercer lugar del hipotético secesionismos de los propios Estados?
¿Qué
el presente y el pasado se conocen parcialmente, pero que los retos del futuro
a medio plazo pueden ser impredecibles en gran parte?
13.
Tener buena voluntad y buena intención es absolutamente necesario para el
correcto funcionamiento de una sociedad, y por tanto para la renovación de los
liberalismos democráticos y los socialismos democráticos en la Piel de Toro, en
Occidente y en el mundo…
© jmm caminero (12 nov.-20 nov. 14 cr).
Fin
Artículo Periodístico 150º: “Hipótesis posibles para encontrar soluciones a la
crisis actual del liberalismo democrático y del socialismo democrático, I”.
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[1] Enviado al periódico Digital el
Porvernir de CLM, el día 24 de nov. del 2014. Publicado el 26 de nov. 14.