Artículo Periodístico 4.321º: “Todo política, todo política, algo economía”.
Recorres los titulares de diez o
doce periódicos diversos de hoy, en la sección de opinión, y te encuentras que
el noventa por ciento son artículos sobre política, la diosa política.
No
niego la enorme importancia de la Política teórica, y, de la Política práctica,
en todas sus realidades semanales o quincenales. No niego la enorme importancia
de esa realidad, al final, pienso y escribo y creo que el Estado es uno de los
grandes inventos de la historia humana. Pero tampoco podemos obviar y olvidar
la economía. Y, tampoco dentro de la política, hay temas que están como
olvidados, semanas enteras sin saber que sucede, por ejemplo, con unas
“supuestas negociaciones en Suiza, o eso dicen”.
Pero
la realidad humana además de la política, sacra política, diosa de la
política-economía, está la tortilla. Hay que hablar de mil otros temas, del
cocido y de la tortilla y de la paella y del churro y del chocolate con leche
de la vida. De mil circunstancias, que pueden ser actualidad o no, novedad o
no, noticias o no. Pero que están ahí. Si están ahí. Que todos los días, cada
corazón humano se ocupa y se preocupa…
Los
padres están asustados con las consecuencias de los móviles en sus hijos, y,
yo, me digo, no pueden tantos cientos de miles de informáticos tan inteligentes
inventar programas especiales y específicos que los padres puedan instalar en
los móviles de sus hijos, para que no visiten determinadas páginas. Programas
para evitar los mobbing. No pueden vender dicha industria, móviles preparados
de tal manera, no sé cómo, que los padres puedan comprar a sus hijos. Es
imposible desarrollar esta línea de investigación…
Sobre
la vivienda, no puede la industria de la construcción hacer viviendas igual que
se hacen vehículos en serie. De materiales suficientemente fuertes, y,
fácilmente construibles, que podrían reducirse su precio a la mitad. Si se
pueden hacer camiones en serie, porqué no se van a poder hacer viviendas en
serie, con materiales dignos y honestos, y, posiblemente, en precio final, sería
la mitad o una tercera parte menos y menor…
Y,
así, decenas de cuestiones, y cosas, pondremos otro ejemplo, las mujeres que
mueren cada mes en este país, ya sabemos por qué, no pueden llevar un móvil con
una aplicación especial, que solo tocando esa tecla, se dé alerta a todas las
fuerzas de seguridad. Y, ese móvil, inmediatamente empiece a recibir y emitir
la conversación a la central de la policía. Una aplicación semejante o parecida
también para miles de mujeres, por no decir, decenas de miles, que van con
miedo, también hombres, por la calle, inventar algo parecido, para al menos,
dar una especie de alarma, que se pueda grabar u oír, o avisar, un preaviso… Se
pueden hacer experimentos a ver, si funcionaría… O, móviles-relojes, que tengan
una tecla especial para apretarla en caso de miedo o temor o urgencia, y, suene
en la policía…
Podemos
hablar también de los miles, decenas de miles de personas que han dedicado diez
o veinte o cuarenta años a una actividad cultural creativa, sea un arte o sea
un saber o sea otro. Y, su trabajo, unas decenas de libros duermen en sus
vientres de sus ordenadores o en sus cajones, sabiendo que todas esas obras se
perderán. Pueden que sean producciones culturales de quinta categoría, pero
son, en muchos casos, trabajos de acumulación de toda la vida. Quizás, hayan
publicado algo, alguna presencia habrán tenido, pero su destino es la pérdida.
No pueden tantas entidades culturales, públicas y privadas, inventar o crear
una manera, física o material o virtual, para que esas obras, si los autores
quieran las envíen y se graben y conserven para el futuro, en forma digital al
menos. Al final, quizás quedaría un archivo de decenas de miles de obras
literarias, filosóficas, teológicas, ensayísticas, poéticas, imágenes de
pinturas, dibujos, esculturas, grabados, composiciones musicales, y, todos los
demás saberes…
Podríamos
seguir porque decenas de miles de personas, hoy, esta noche han estado al lado
de sus parientes y de sus hijos y de sus padres y de sus hermanos y de sus
esposas al lado de la cama en el hospital. Millones de personas salen cada
tarde o noche o mañana a su trabajo, que les gusta más o menos, pero que tienen
que hacerlo. Y, así miles y miles de temas y de cosas… Realidades humanas… Hoy,
mismo, decenas de miles de personas nacerán, decenas de miles de personas
fallecerán en este país. Hoy, mismo. Hoy, mismo sucederán cientos y miles de realidades, unas nuevas, otras, como
siempre suceden, todas las mañanas procuramos desayunar. Pues contar el
desayuno también es un posible artículo periodístico. Ahora en verano, la
siesta o medio duermevela también.
Hoy,
como otros muchos días, me recorro los titulares de una docena de periódicos de
nuestro terruño patrio, de distintas orientaciones y versiones y visiones, y,
unos te dejan leerlos, están abiertos, otros solo las cuatro líneas primeras.
Porque no puedes ser suscriptor de todos y de todas las cabeceras… Y, como casi
todos los días, te encuentras el noventa por ciento de opiniones, artículos,
columnas, tribunas, viñetas sobre temas de la actualidad política, algo de la
economía, y, muy poco de todos esos temas, esos temas que son y existen…
¡Hay,
columnistas de primera y de segunda, de primera porque tocan temas de política,
y de segunda, los que se ocupan del resto; de primera, porque publican en
cabeceras nacionales, de segunda, porque editan en medios de provincias; de
primera, porque cobran sus dineros por sus palabras publicadas, de segunda,
porque solo reciben las gracias, y, agradecen que les publiquen… de primera porque
son leídos por decenas de miles de personas, y de segunda porque abren sus
textos unas docenas de ojos; y de primera y de segunda y de quinta…! ¡Paz y
bien…!
http://articulosperiodisticosjmm.blogspot.com.es © jmm caminero (10-14 julio 2024 cr).
Fin artículo 4.321º:
“Todo política, todo política,
algo economía”.
E.
14 julio