Artículo Periodístico 3.264º: “Censura, heterocensura, autocensura”.
La
censura es una realidad muy compleja, que en mayor o menor grado se produce en
todas las sociedades, pero especialmente, en sistemas sociopolíticos
no-democráticos.
El
concepto-idea-enunciado de censura es complejo y simple. Como toda realidad
humana está formada y conformada por multitud de esferas-dimensiones-ámbitos-perspectivas-intereses-fines.
En ningún momento, voy a justificar la censura, ni la heterocensura, ni la
autocensura. Pero incluso en sistemas democráticos, los límites son la ley
jurídica, basada en derechos humanos y en la dignidad de la persona, la
democracia, y los grandes valores de siglos…
Este
tema o cuestión, es uno, entre muchos, en los que la mayoría de seres humanos
no intentan ser objetivos. Al menos en lo posible. Al menos en la medida de
ciertas realidades objetivas e históricas y con datos. Un sujeto equis, al
analizar o redactar algunas líneas sobre esta cuestión, debe someterse a un
pensamiento racional y analítico sobre si mismo. Que sus deseos o sus fines o
sus motivos o sus intereses o sus historias o sus emociones no le engañen… Por
ejemplo, se habla de la censura en un periodo de tiempo/régimen/sociedad equis,
no pondré ejemplos, pero raramente, se habla de la censura del periodo anterior
al equis.
Para
nosotros, modestos escritores y observadores y pensadores, la mayoría de
nosotros, la censura es el mal más grande. Porque a la autocensura que ya
sentimos en nuestras carnes, tenemos la espada de Damocles de la censura
externa. Pero no nos engañemos, incluso en sistemas democráticos existen
microcensuras, porque eso son los límites y los poderes de los poderes
intermedios que existen en la sociedad: el público censura con sus gustos, los
poderes políticos y económicos y sociales y culturales y académicos, diríamos,
intermedios, porque están en el medio de la sociedad, escogen y seleccionan y
alaban y niegan, con lo cual algunos productos culturales los elevan y, a
otros, los dejan que se vayan durmiendo/muriendo en los
cajones/talleres/estudios/despachos…
Porque
no olvidemos, no solo existe la censura política, sino la censura social y
económica y política y cultural y afectiva y personal sobre individuos y
colectivos y, algunos productos culturales. Cierto es que no es lo mismo en un
sistema democrático, que en uno, semidemocrático, que en uno no-democrático. Es
como una mañana de enorme tormenta y frío, o una mañana con nubes, o una mañana
con sol calentito que suaviza los huesos por dentro…
Tampoco
olvidemos que no es lo mismo la libertad de opinión y pensamiento y conciencia
que la libertad de costumbres, usos, actos, hábitos. Porque no todas las ideas
son buenas y verdaderas, ni todos los actos o costumbres o hábitos son buenos y
verdaderos… Porque en libertad de pensamiento se debe aquilatar lo máximo, pero
posiblemente, en la libertad de usos y costumbres hay que limitarlas más, según
la veracidad, verdad, bondad, salud psíquica y física y moral…
La
ilustre escritora y periodista Carmen Rico Godoy, en un regimiento de palabras,
formando y conformando una columna periodística literaria de opinión, redactó
una que se titulaba: Censor, censor si señor (…), que
eclosionó como las tortugas que emergen del huevo, en el Diario 16, el día 10
de enero de 1977, en el que nos habla de estas cuestiones, de alguna forma con
la figura literaria y de la oratoria clásica, que atraviesa los siglos, de la
ironía…
Ustedes
deben saber/saben, que la figura del censor, no ha nacido en el siglo veinte,
sino que viene, al menos de la antigua Roma, y, era un magistrado que se
ocupaba del censo de la ciudad y velar sobre las buenas costumbres de los
ciudadanos. Ahora, un censor o mejor dicho un sistema de censores o
censoritario, sería una entidad pública o administrativa que se ocupa de velar
sobre la moralidad política o social o cultural o religiosa o moral de una
sociedad, poniendo límites a determinados productos, de la opinión pública o de
la cultura o de los libros o del cine o de las opiniones o del pensamiento o
de…
Nada
hay como la libertad, nos diría el caballero Quijote, quizás, porque el
autor-creador-inventor-diseñador, un tal Miguel de Cervantes, sufrió durante mucho tiempo,
muchos percances a la falta de libertad, incluso dentro de la sociedad de su
tiempo, quizás demasiado censura, entre otras de descendientes de judíos, según
parece ser, además de no estar en una situación boyante económicamente, de
pertenecer a una clase social, ni rico, ni pobre de origen, de padecer siempre
la búsqueda de una economía suficiente, de haber estado preso en España, de
haber tenido que huir de Castilla, de estar preso en Argel, de padecer toda la
vida, las complicaciones familiares. Por eso, el gran Quijote canta siempre a
la libertad, siempre también la defensa de la mujer…
En
Europa, mientras siga siendo Europa, en Occidente mientras siga siendo
Occidente, la libertad de culto, la libertad de religión, la libertad de
creencias, la libertad de conciencia, la libertad de expresión, la libertad de
publicación son libertades y derechos casi sagrados. Siempre dentro de la
botella de los Derechos Humanos. Pero tampoco podemos olvidar y obviar que en
nombre de mil razones o motivos o causas, existen muchos individuos y
colectivos, que no les agrada tanta libertad. Que no sabemos que sucedería si
tomasen el poder máximo o máximo poder, o poderes intermedios, económicos,
políticos, culturales, sociales, educativos, etc. No sabemos, queda una duda,
si de una manera o de otra, nos reducirían la libertad. Porque la libertad es
una realidad, enormemente fuerte y débil, enormemente compleja y sencilla. Y,
se puede ir amplificando o se puede ir reduciendo. La libertad es un
adolescente eterno que hay que cuidarlo para que no se muera o no fenezca en el
tiempo y en el espacio…
Pero
tampoco podemos olvidar, que en los cajones de las viviendas, existen decenas
de miles, cientos de miles de productos culturales, sean mediocres o excelsos,
que se están pudriendo en una muerte segura. Solo es cuestión de tiempo. Porque
el concepto de censura, autocensura, heterocensura es polisemántico,
poliédrico, polifacético, poliperspectivistico, polidimensional,
policonceptual… ¡Paz y bien…!
https://museovirtualcuadernosdelamancha.wordpress.com © jmm caminero
(01-09 nov. 2022 cr).
Fin artículo 3.264º:
“Censura, heterocensura, autocensura”.
E. 09 noviembre