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Artículo Periodístico 3.376º: “Soñar con/en el café Gijón”.

                         Artículo Periodístico 3.376º: “Soñar con/en el café Gijón”.

Todos los intelectuales, entremos todos los oficios culturales, desde hace dos siglos, posiblemente, sueñan con participar en algún café tertulia, sea en Madrid, sea en provincias.

Las diversas tertulias-cafés de las grandes ciudades, especialmente, de la villa y corte, se han convertido, en el símbolo-signo-bandera de ese deseo. No hay escritor del siglo veinte, en este terruño, que no haya pasado algún día, o lo haya intentado por algunas de estas, de la capital del reino o de la república o del régimen que haya sido. Entre otras, la más notoria o famosa, porque ha perdurado más décadas, ha sido la del Café Gijón. Cualquier escritor o pintor o dramaturgo o…, que haya pasado por el poblachón manchego de Azorín, Madrid, no ha dejado de ir, o ha intentado incluirse o insertarse o incrustarse en algunas de sus subtertulias, divididas por géneros, divididas por personalidades.

Se podría hacer una historia de la literatura y del periodismo en español y español, según la historia de las tertulias, de Madrid, Barcelona, Valencia, Granada, Sevilla y de otros lugares, con más tiempo o espacio o menos. Es más, algunas figuras iban pasando de un café a otro, de una cafetería a otra, para ir creando su pequeño reino de taifas cultural. Es la historia eterna de la interpretación del mundo, tener-disponer-contener una pequeña cohorte de seguidores, para que las ideas de tal personalidad se extiendan, sean de literatura o filosofía o teatro o música o religión o…

Nos narra José Estebán Gonzalo, en un artículo largo, titulado El Café Gijón, publicado en El Libro del Café Gijón, 1999, algo de los vericuetos y de la historia de este famoso establecimiento y cafetería y universidad popular que es o era o ha sido o sigue siendo, porque todavía respira, el Café Gijón. JEG nos cuenta una historia parcial del Café Gijón, con algunas personas-ajes que pasaron por este lugar.

Dicen, que no solo asistían los grandes popes de la cultura del momento, los que querían o deseaban ser algo en la cultura, en la rama que fuese, los que empezaban y querían abrirse un camino, sino también, multitud de sinfonías de voces, que querían ver o percibir, o ser vistos o ser percibidos.

También, cuándo no existían los móviles, y, por tanto, potencialmente, saber dónde está cada uno de estos instrumentos, todos los oídos gubernamentales, fuese de un régimen o fuese de otro, tenían también plaza en este lugar, con lo cual, era un sitio-lugar-lagar para recoger información, para percibir el corazón de la intelectualidad, cuales eran de los míos o tuyos o nuestros o vuestros, o, quién sabe recoger algún rumor, que junto a otras fuentes de información, porque así se indica, en tantas realidades sociales. A semejanza como se recolecta agua, se recolectan el agua de la información…

En provincias, generación tras generación se sueña en algo semejante-parecido, crear un café tertulia. En los grandes pueblos también. Y, todos y en todos, cada ciertos años, alguien, se junta con varios amigos/as y realizan un trabajo semejante, ayer y hoy. Pero por lo general, los deseos son buenos, pero las cosechas son pequeñas. Las provincias, los poblachones de las provincias, miran con estupor y temor y envidia, las capitales de sus regiones, y, estas a las grandes ciudades o megalópolis de la sociedad-nación-Estado.

El número de personas que habita un lugar permite el nacimiento de muchos tipos de flores y plantas y árboles. La riqueza cultural surge de la riqueza económica del lugar, y la riqueza económica y cultural renace de la riqueza política de ese ente urbano y político. Esta es la realidad. Al final, Marx quizás tuviese razón, la economía condiciona la superestructura. Pero no se dio cuenta, que la superestructura condiciona la infraestructura, o la economía –lo cito ahora, porque durante décadas, no había contertulio que no le citase, y, desde hace algunos lustros, parece se ha olvidado del/en el corazón de los hombres-. Es un misterio como los humanos recuerdan tendencias culturales y prohombres y promujeres insertos en ellos, tiempos de grandes homenajes, tiempos de grandes olvidos. Es un misterio…

Me pregunto, porque todo lo humano tiene que terminar, y, esta columna ya está dispuesta a realizar esa última bocanada de palabras, me cuestiono, si no deberían incentivarse varias tesis doctorales y trabajos de fin de grado, sobre la cultura y los cafés-tertulias, de una ciudad o de otra. Me pregunto si el Café Gijón, en un esfuerzo debería intentar documentar-archivar-indexar todas las referencias que cientos de autores y autoras han realizado sobre este ente-monumento-acontecimiento que es y ha sido, porque si se coleccionasen citas, de artículos, periódicos, libros, entrevistas, autores, personas y personajes, quizás, acabaríamos siendo conscientes, que todos o casi todos lo han citado. Incluido este modesto polígrafo o plumífero que intenta captar algo de las nubes de la realidad…

¡Mientras tanto, tú, si te dedicas a este laboreo, aunque sea parcialmente, estés bajo el aire de plomo o de ceniza o de arcilla que sea, tenga el nombre que sea, en tu interior sueñas, que se abra un Café Gijón, en tu ciudad, y, allí, diez o veinte de los cultivadores culturales, jóvenes y ancianos/as os juntéis para intentar tener un lugar bajo el sol o la galaxia de la creación cultural. Pero pasan los años, y, no se crea esa realidad, o nadie te invita a esos opúsculos que nacen y mueren en meses…

http://filosliterarte.blogspot.com.es      © jmm caminero (29 octubre 2022-18 enero 2023 cr).

Fin artículo 3.376º: “Soñar con/en el café Gijón”.

E. 18 enero 2023 a MiCiudadReal.es. Tarancon Digital.es.

Humor 1826 a 1829 publicados en digitales.

      Humor 1826 a 1829 publicados en digitales.       (No están ordenados).                     26. Humor 1.826 [1] .                    ...