Artículo Periodístico 4.279º: “No nos dejes caer en la tentación…”.
La cultura ha cambiado
radicalmente en dos o tres generaciones en Europa, todo el mundo sabía
reconocer multitud de ideas, signos, símbolos, palabras religiosas pero ahora
no.
Supongo,
que todavía la inmensa mayoría de la población, sean ateos o agnósticos o
teístas o creyentes en otra religión no-cristiana, sabrán que esta frase es una
de las peticiones del Pater Noster, o Padre Nuestro. Oración
esencial del cristianismo.
Supongo
que esta frase tiene diversas interpretaciones, que no se contradicen entre
ellas pero se completan y complementan. Debo indicar que no soy un teólogo, y,
no tengo conocimientos especiales y específicos y esenciales de teología y
moral y espiritualidad cristiana. Pero, también sería mentira y error indicar
que no sé nada. Algo sé, por tanto esta frase tiene diversas connotaciones,
entre otras: de no caer en la tentación del mal, de no caer en el mal, de no
caer en la tentación producida por el tentador-malo.
En
definitiva, todo ser humano está desde su nacimiento, o un poco después,
tentado a caer en algún tipo de mal, sea de palabra, deseo, pasión, acto, de
omisión, -se incluía durante siglos, la omisión-. Pero evidentemente
materializar o cristalizar en cada situación, lo que es una tentación es difícil,
porque muchas veces el mal-tentación al mal se viste de bien, como la famosa
película, El diablo viste de Prada, 2006. Y, cada uno sufre las suyas.
Durante siglos, habría que cumplir los diez mandatos o palabras o mandamientos
de Moisés, y, así de ese modo los humanos nos evitábamos caer en multitud de
males.
Pero
me pregunto, cuántos conocerán o conoceremos de nombre, los diez mandamientos,
aunque sean salteados. Y, también evitar caer en los errores morales graves o
pecados capitales. Capitales viene de la palabra latina, capita, cabeza, es
decir, que uno de esos males es la fuente de otros muchos males. No sé si usted
se acordará de ellos: lujuria, envidia, avaricia-codicia, pereza-acidia,
ira-cólera, vanidad-soberbia, gula. Ideas que no son sólo judaicas o
cristianas, sino que en parte ya estaban en el mundo griego…
Por
tanto, hubo tiempos que una parte de la población al amanecer y levantarse,
intentaba ya que sabía sus errores, intentaba no caer en ese día, en su manera
particular de mal y de maldad. Hubo un tiempo que la mayoría de la población o
una parte importante de ella, al acostarse examinaba o evaluaba, diríamos hoy,
si había caído en alguna de esas tentaciones…
El
mayor mal de nuestra época, o, al menos uno de los mayores males, que nos han
traído multitud de causas y razones, pero una de ellas es que algunos
pensadores y filósofos en estos tres últimos siglos han dicho que el mal es
bien y el bien es mal, -o, al menos algunos de sus clases-, es no ser
conscientes que podemos caer en la tentación, que podemos caer en el mal, que
existe el mal y existe la tentación al mal, que muchas veces esa tentación está
bañada, aparentemente de bien o de felicidad o de necesidad o de la situación
imposible de superar. Hemos olvidado que existe el mal, y, que existe la
tentación y que la tentación puede venir de la carne, del mundo y del tentador
–así el cristianismo lo ha estado proclamando durante siglos-. Puede que usted
no crea en el cristianismo pero si puede entender la filosofía cristiana como
solo filosofía… Aquello de las Tentaciones de San Antonio Abad o de San Antonio el Egipcio…
Todo
esto, me lo ha recordado un artículo del gran Savater, filósofo y pensador y escritor, aunque él, dice que no es
un filósofo, sino un profesor de filosofía, cierto es que aplicado a un marco
político, que aquí no citamos, pero en este recorrido por el columnismo de
opinión que voy haciendo, ya he citado en cientos de ellos, a multitud de
autores. Ahora y hoy, toca otra vez a Savater,
Fernando Savater, FS, y así
recordamos al maestro del columnismo, Umbral.
Podría redactar este artículo sin citarlo, pero creo que no sería justo, ni
equitativo, por eso de dar al Cesar lo que es del César… titulada dicha columna Indulgencia
plenaria, publicado en El País, el 23 de junio del 2021
–aunque reitero que habla de política actual, entre otras cosas-.
Pero
mi modesto artículo de esta temática, va por otros derroteros, no por la
sociopolítica. Pienso que muchos males y torbellinos de este orden que
llovieron en el siglo veinte sobre el planeta y sobre Europa, especialmente las
dos guerras mundiales y los campos de concentración, que hubo a miles en
Eurasia, bajo varias banderas diferentes. Creo que la razón esencial de tanto
mal, es que olvidamos, dejamos de creer, que algunas ideologías dejaron de
creer, que algunos sistemas sociopolíticos dejaron de creer, en esta frase: No
nos dejes caer en la tentación… No nos dejes caer en la tentación… No nos dejes
caer en la tentación…
“No nos dejes caer
en la tentación…”.
http://twitter.com/jmmcaminero © jmm caminero (14-23 junio 2024 cr).
Fin artículo 4.279º:
“No nos dejes caer en la
tentación…”.
E.
23 junio