Artículo Periodístico 4.621º: “Sobre tiempos felices y R. Sánchez Ferlosio”.
Todo el mundo habla y siente y
busca la felicidad. Y, desde joven he ido buscando con antorcha o no, un
concepto descriptivo y esencial sobre la felicidad…
De alguna manera, este concepto o
idea o enunciado, lo he ido retrasando, en escribir o en redactar algunas
líneas sobre él, durante décadas. Porque quizás haya que diferenciar o matizar
el concepto de felicidad del de alegría o del de gozo. Gozo y alegría y
felicidad, se besan pero no son lo mismo. Pero no sé muy bien lo que son. Si
usted ha entrado en este artículo para encontrar una explicación total y
radical, creo que no se la puedo ofrecer. Porque intervienen muchas partes
mentales y morales y psicológicas y reales.
Me he atrevido a tocar este tema,
porque llevo muchas décadas retrasándolo y me he encontrado con un artículo del
notable escritor y pensador, Rafael
Sánchez Ferlosio, que no debemos dejar que se olvide, que ya en otras
ocasiones he indicado, la necesidad de crear una Fundación para que sus
escritos, miles de páginas no se pierdan, quizás unirla con la de su exmujer, Carmen Martín Gaite… ya saben, que voy
haciendo una especie de viaje de turismo y cultural por los artículos o algunos
de ellos, -los nombres, de decenas de articulistas y escritores articulistas y
periodistas articulistas-. Hoy, hoy ha tocado a Sánchez Ferlosio, en una columna titulada: Pecios. ¿Pero ha habido alguna vez
“tiempos felices”. Publicada en El País, el 16 de junio del 2012.
Si afrontamos el tema de la
felicidad, ya los griegos empezaron a describirlas de muchos modos, de alguna
manera, podríamos indicar que patinamos –dicho con todo respeto-. Pero si
seguimos la sugerencia de Descartes,
un problema equis, dividirlo en partes y secciones. Entonces, creo que se nos
ofrece una gran claridad. Pongamos por caso, no soy capaz de abordar el
concepto de felicidad total e integral. Pero si podemos hablar de felicidad-alegría
o de gozo-alegría que se acerca mucho a la realidad de la felicidad, si nos
decimos:
¿Tenemos felicidad en cuanto a la
economía, tenemos suficientes bienes materiales y bienes de vivienda…? ¿Tenemos
suficiente alimentación y realidades semejantes, de las necesidades primarias…?
¿Somos o tenemos amor o afectividad equilibrada y racional, amor y amar
suficiente? ¿Tenemos o creemos que tendremos la Eternidad Buena, cuándo esto
termine para nosotros…? ¿Tenemos suficientes conocimientos y cultura…? ¿Tengo
suficiente descanso psicológico y moral…? Etc.
¿O, dicho de otro modo, tenemos
satisfechas, las necesidades primarias, en parte las secundarias, en parte las
terciarias…? ¿O, no?
Si nos autoevaluamos siguiendo un
esquema semejante al que antes he indicado, si desde la psicología hiciesen
diversos test abordando esta cuestión, nos podría dar una enorme luz, un gran
foco de aclaramiento/aclaración. Ya que esta rama del saber se ocupa de los
temas semejantes a esto. También podrían hacerlo con la cuestión de la
felicidad. El tema de la felicidad sea un tema de la moralidad, pero también de
la psicología, y, también de la espiritualidad… Pero si la psicología aborda
este tema o cuestión, podría dividir y definir en distintos campos; la
felicidad en el mundo económico personal, en el mundo de la salud personal, en
el mundo de la afectividad personal, en el mundo de y de… Y, creo que así,
tendríamos un abordaje más profundo y real sobre esta cuestión. Bueno, si
todavía no existe, sugiero e incentivo a algún departamento universitario de
Psicología, que empiece con esta temática, empezar a realizar esbozos en este
sentido.
Si nos fijamos en los anteriores
parámetros o ítems, nos daríamos cuenta, que no somos tan felices como creemos,
pero tampoco tan infelices como creemos. Puede que una persona no tenga una
vida económica muy brillante, pero tiene un hijo, que le compensa lo
suficiente, puede que otra persona, no tenga una vida afectiva, demasiado
alegre pero dispone de suficientes bienes materiales para llevar una vida
normal y rutinaria sin sobresaltos, aunque no con grandes gastos. Alguien puede
que tenga un coche que ya es anciano de solemnidad pero disfruta de multitud de
actividades culturales, de diverso tipo. Alguien, individuo o grupo, no vive
con demasiada economía o cualquier otro factor, pero se inserta en las sábanas
y existe/duerme con sosiego y tranquilidad, sabe que nadie le va a levantar de
la cama y llevarlo a un recinto cerrado y con púas. Alguien puede no tener una
satisfacción afectiva pero no vive en una sociedad en conflicto armado, etc.
Por tanto, es cierto, que en
todos los tiempos han existido tristezas y penas y angustias. Es cierto, que
todos los hombres sufren de esas realidades, antes o después. Pero también es
cierto que si abordamos este tema, como anteriormente se ha indicado, nos
daremos cuenta, que tenemos realidades que podemos estar completamente
satisfechos, podemos tener alegrías y tener un grado de felicidad. Quizás en
otros no.
Pero debo confesarte, que creo
esta es la realidad de todos. Todos, todos en algunos temas o cuestiones, están
en una escala del cero a diez, en siete, en otras a cinco, en algunas a tres.
Por eso, debemos aceptar que tenemos gozo-alegría-felicidad en algunos campos,
y, en otros no. Por tanto, no olvide esta realidad… Hoy, viene su hija y le da
un beso, o viene su nieto y le da un beso o se marcha de vacaciones dos
semanas, o degusta una buena comida, o un gran concierto o… Observe y mire,
tantas cosas pequeñas o medianas que hoy han sido buenas, que han estado
rozando la alegría-felicidad, no podemos negar que otras, pues están en la
tristeza…
Puede que no hayamos descubierto
la fórmula de la felicidad, pero si, que sea usted consciente, de que hoy
realiza cosas que son realidades felices. Quizás, este artículo entre en esa
escala y valoración. Paz y bien.
http://youtube.com/jmmcaminero © jmm caminero (21-29 dic. 2024 cr).
Fin artículo 4.621º:
“Sobre tiempos felices y R.
Sánchez Ferlosio”.
E.
29 dic.