Artículo Periodístico 4.485º: “¿Hoy se puede perder un Quijote?”.
¿Hoy, con tantos medios y ofertas
se puede perder una gran obra cultural o de autoría o de creación sea en la
literatura, en las artes plásticas, música, humanidades, etc., o no…?
Este
es un tema, que está siglo tras siglo en la cultura, pero en éste también. Hace
unas décadas un gran editor español, no diré el nombre, proclamó en una
entrevista, la siguiente afirmación: “Hoy,
en España no se perdería un Quijote”. Desde entonces, en los círculos y
recovecos y esferas de la vida cultural, a y, en todos los oficios se plantea
dicha pregunta o dicha cuestión…
Existen,
dos posturas, simplificando y sintetizando: Los que expresan, que hoy aunque
exista una enorme oferta en todos los campos de la realidad cultural, existen
multitud de demanda y de receptores, por lo cual, una gran obra artística o
literatura o humanística, ya hecha, otra cosa, quién podría hacerla en el
futuro, si se le apoya o no. Una gran producción cultural, no se perdería,
porque existen muchos intermediarios culturales, en diversos oficios y
profesiones, y, existen muchos medios. Y, siempre cabe, en mayor o menor medida
exponer lo suficiente en Internet. Por lo cual, una producción cultural de
valía, siempre llegaría a un centro de poder o un receptor, con suficiente
poder cultural, o un intermediario cultural que la elevaría a niveles de
conocimiento general…
La
otra postura, indica que siendo cierto lo anterior, también es verdad, que un Quijote ahora, un verdadero Quijote,
podría ser una producción cultural tan innovadora, que quizás, no seríamos
capaces de ver o prever sus alturas, porque podrían incluir enormes cambios
en muchas facetas, incluso insertando errores de todo tipo según el saber y el
arte o el género.
Por
otro lado, en esta segunda postura, también se indica, que hoy, cualquier persona que se dedica estos
temas, recibe tal cantidad de información, que quizás, no se fija lo
suficiente, en lo que le llega, sea por carta postal o sea por sistemas
informáticos. Y, cómo cada persona tiene muchas obligaciones, quizás, le
pueda llegar algo que sea diferente o diferenciador, claramente que abre nuevas
puertas a ese saber o ese género y pasar desapercibido. Más, como ocurre en las
Artes y las Humanidades, que no se pueden aplicar los sistemas de verificación
o falsación de Popper. También
influye la oferta y la demanda y los números de toda empresa mercantil cultural,
que prima sobremanera…
También,
algunas personas incluyen que la industria cultural privada, que es la que mueve y remueve el
mercado del saber y del arte y de las artes, en gran parte, puede que esté de acuerdo en publicar un
libro de doscientas páginas, de un desconocido, pero no uno de mil páginas de
una persona sin firma. Porque tiene que buscar que su inversión no
perderla, y, por tanto, poder continuar en este mundo de la industria cultural.
Porque los gestores culturales, también tienen que pagar hipotecas y sobrevivir
e irse a la playa y pagar colegios…
Siempre
se habla de Cervantes y de Shakespeare, pero se indica que El
Quijote, al principio solo tuvo éxito entre clases medias y populares,
no se le otorgó todos los valores que después se le adhirieron; y, por otro
lado, Shakespeare, tuvo éxito
comercial como empresario y con sus obras, pero se indica que era un autor
entre muchos que existían en ese momento, quién sabe, si sus amigos no hubiesen
publicado la primera edición, si su nombre se hubiese perdido por los siglos,
igual, como parece ser también se han perdido algunas de sus obras de teatro…
Indicar
que Pessoa, Kafka, Dickinson y otros
en la literatura, pero sucede en todas las artes y en casi todos los saberes
humanísticos, se pudieron perder y olvidar. Indicar esto, autores del siglo
veinte y del anterior… Recordar esto, no gusta a muchos oídos… pero así es…
Una
posible solución es plantearse si existe racionalidad en la gestión de la
cultura, a y en todos los aspectos… Si, en pleno siglo veintiuno es lógico y
racional y eficiente y eficaz, que pongamos por caso un escritor equis, con su
novela o sus diez novelas, se haya pasado diez o veinte años de su vida, no
solo haciéndolas, sino enviándolas a decenas de intermedios culturales públicos
o privados. Lo mismo si es un constructor de significantes y significados
estéticos y artísticos. O, cualquier otra realidad o rama del saber…
No
sería, más lógico y racional, que en vez de ir los peces como hasta ahora,
hasta los barcos de los pescadores culturales, fuesen los pescadores con sus
barcos a los calados de los peces. Dónde están o estén los peces.
O,
dicho de otra manera, creen directorios-archivos-diccionarios virtuales, por
saberes y por territorios… y, en ellos, se puedan insertar, en una ficha de una
página para cada autor/a, todas y cada una de las personas que en ese
territorio se dedican a la literatura o el pensamiento o la fotografía o la
novela o el arte plástico. Y, en cada ficha existan unos datos, y, unos
enlaces…
De
tal modo, que si alguien, una empresa gestora de producción cultural, busca un
tipo de producciones culturales o de autoría o los intermediarios o los
investigadores o los estudiosos o los gestores, se acerque a mirar a ese
directorio y busque quién y quienes están y son, y, qué obras puede encontrar y
qué enlaces, etc. Puedan ver, los datos suficientes y enlaces suficientes, para
encontrar los mil fotógrafos de una región o territorio, y, con esos datos
buscar y rebuscar para hacer, digamos un artículo académico o una exposición
antológica o…
Así,
de este modo, es posible, que hubiese menos posibilidades y probabilidades que
un Quijote actual no se perdiese… Si,
creo que hoy, en la enorme ingente cantidad de producción cultural, en la
enorme e ingente cantidad de información que todos los sujetos reciben cada
día, hoy, a alguien le puede pasar una vez por sus ojos, un Quijote actual, y, no percatarse, o un Guernica actual y no percibirlo, o una Novena Sinfonía actual y no ser consciente…
¿Porque
la Administración sabe los panaderos y los cirujanos que existen en un
territorio, pero alguien sabe cuántos filósofos, pensadores, ensayistas,
fotógrafos, escritores, poetas, artistas plásticos, matemáticos, etc., existen
en un territorio zeta… y, que han sido o estado en esa geografía, o que
continúan todavía dando sombra a las aceras de sus aldeas o pueblos o barrios o
ciudades…?
La
gran revolución cultural, que hoy podría producirse, es la racionalidad y la
eficiencia de la cultura. De la creación cultural. Más teniendo en cuenta, que
hoy, pueden existir unas necesidades y gustos y fines y objetivos culturales,
pero dentro de cien años, existir otros… Pero si no se recoge lo que existe
hoy, es casi imposible que les llegue lo de hoy, a cien años visto. Por tanto,
lo de hoy, está condenado a la desaparición y al deterioro y a la pérdida y a
la destrucción… Paz y bien y racionalidad y eficiencia…
http://articulosperiodisticosjmm.blogspot.com.es © jmm caminero (13-20 sept. 2024 cr).
Fin artículo 4.485º:
“¿Hoy se puede perder un Quijote?”.
E.
20 octubre