Artículo 5.108º: “Caminando por Huesca capital, I”.
Una ciudad o localidad dicen que
se dispone de diversas miradas según la relación existencial con ella: si has
nacido en ella, si la habitas, si vas de vacaciones o si existe un descendiente
tuyo en ella.
Estas
cuatro categorías antropológicas existenciales o sociológicas o de
habitabilidad son las esenciales. Es lógico, no es lo mismo si has nacido en
ella o no, si la habitas o vives en ella o no, si existes en ella y ella existe
en ti, si has nacido en ella o no, si estas de vacaciones o de descanso un día
o varios, o si esa ciudad la habita un antecesor o descendiente de tu persona.
Estas cuatro categorías son esenciales, a su vez, se subdividen, pero ahora no
viene a cuento más explicación…
Unas
ciudades son más acogedoras, Madrid
acoge y recoge a todo el planeta. O, al menos eso dicen, porque lleva cinco
siglos aceptando a personas y personajes, y, por eso ha ido creciendo y creando
olas de ampliación como un globo. Se dice que Nueva York le sucede lo mismo. Allí, en principio todos son iguales
en derechos teóricos y prácticos. Evidentemente, en ningún lugar atan canes o
perros o lobos domesticados con chorizo o longaniza.
Pero
sabemos que en otras ciudades y comarcas no sucede lo mismo. Es muy importante,
si a los que vienen de fuera, del exterior, les han puesto los autóctonos un
substantivo específico. Si eso ocurre, es algo a tener en cuenta, y, que puede
ser importante para comprender y entender esa localidad o lugar. En Madrid no hay nombres para nadie, a lo
sumo ese ser humano es o viene de Andalucía o de Jaén o de la Mancha o de
Soria. Pero Madrid está relleno de
calamares de personas de todos los lugares, la Villa y Corte, como toda capital
de provincia se nutre de toas las comarcas que lo forman y conforman. En el
caso de Huesca desconozco este
aserto, hemos ido varias veces, con distintos fines, con distintas personas de
la familia. Ya narraremos algo.
Como
en todos los viajes, la traslación del cuerpo-carne-mente-alma a otro lugar.
Como en todos los descensos y ascensos por otras calles, si has ido varias
veces, en la memoria-recuerdo se mezclan. Nunca sabes muy bien este hecho o
acontecimiento si te sucedió en un tiempo o en otro. Desde Cela, narrar viajes es utilizar adjetivos. Los adjetivos hacen el
viaje, desde Viaje a la Alcarría, hizo otros y rehizo otros en forma de
libro, pero aquel de la Alcarría lo
hizo eterno. Es un libro que quedará durante siglos. Mientras los humanos
sientan, sean semejantes a nosotros…
Recuerdo
que siempre que hemos ido hemos habitado un hotel encima de una estación de
tren. Es cómo esos juegos de niños, los trenes van por todos los lugares. Es
cómo si la tecnología de hace dos siglos, se introdujese en los edificios de
cemento y cristal y ladrillo. No es el único lugar, sobre estaciones de trenes
y semejantes existan hoteles. En diversos lugares. Pero a veces, en serio y en
broma me he preguntado, si habrá un libro, ya que hay de todos los temas, dónde
se narren hoteles sobre encima de estaciones de trenes o de raíles o semejante,
también podría ampliarse a los autobuses. Huesca
dispone de esta singularidad, una de las estaciones de Barcelona también, Atocha de Madrid no…
Los
que habitamos pequeñas ciudades, digamos entre cincuenta y cien mil habitantes,
tenemos algo en común. Nos entendemos mejor, o dicho de otra forma, si paseas
por otra ciudad similar, aunque no la hayas conocido antes, percibes que
dispones de muchos lugares en común, semejantes o parecidos, incluso el ritmo
de la vida es similar. Unas, unas suelen tener un núcleo medieval antiguo o de
hace cuatro o cinco siglos, y, el resto moderno en distintas etapas. Otras, han
terminado con su núcleo medieval. Algunas quedan algunos trazos-lienzos de los
muros medievales, otras nunca las tuvieron… pero los negocios son parecidos o
semejantes, las luces y las sombras parecen analógicas. Cierto que un viajador
de unos días o de varias veces, no puede conocer todo y en todo… se queda en la
superficie, si entra más en ella, es por la experiencia acumulada, y, siempre
en forma de hipótesis, porque no puedes engañarte en las interpretaciones.
Decía alguien, que en toda ciudad hay piedras y pobres… Supongo que los
sistemas sociopolíticos del futuro reduzcan a nada, la segunda parte de la
frase…
La
plaza con soportales, no recuerdo el nombre, allí estaba la oficina de turismo,
la visitamos y preguntamos cosas, diversas por realidades distintas. Allí
también nos sentamos en una terraza y tomamos una caña sin alcohol. Allí
también entramos en un comercio muy antiguo, y, varias veces, ofrecimos dinero
a cambio de algunas dulzainas típicas, allí también observamos a los
viandantes. Sentarse en una terraza en la calle es una manera o forma de
observar el corazón de una ciudad. Pasas desapercibido y puedes mirar el
exterior y el interior. Cuándo estás un rato, los de las mesas de al lado te
olvidan, y, puedes oír sus conversaciones, que en definitiva, son semejantes a
las de todos los humanos, sus preocupaciones con los niños o con los novios o
con el piso que se la ha roto un enchufe de luz, o, la mirada del silencio
alegre o triste de seres como tú, con dos piernas y un corazón y un alma, que
intentan vivir y sobrevivir…
Conocí
a alguien, que era rezador, todavía deseaba creer en el existir del Buen Dios,
que una parte de sus oraciones, siempre pedía que Dios tuviese misericordia y
piedad de todas las personas con las que se había cruzado por la calle, en toda
su vida, que había visto, que había mirado unos segundos, que había escrito una
carta, ahora correos electrónicos, incluso que había visto en fotografías… Otro que escuchaba en silencio este relato,
decía, pues entonces rezas por muchos, por muchos miles, decenas de miles, en
una vida de treinta o cincuenta años…
Existe
un Museo
Pedagógico en la ciudad. Paradojas de la vida, las veces que hemos
visitado este corazón de carne y de aire, de esta ciudad ha sido por razones
pedagógicas y de enseñanza. En ambos descendientes, la primera para una
entrevista de trabajo para un colegio en la calle de la Cava, si no recuerdo
mal, no lejos de la iglesia del santo de la ciudad, del santo mártir si la
memoria no me falla. La segunda para que la otra descendiente obtuviese una
plaza de trabajo temporal. Y, los mecanismos de la vida, este museo pedagógico
nunca lo hemos visitado, pero también existe otro en la capital de Albacete, y, hemos ido muchas veces a
la urbe, y, tampoco nuestro sueños y pies han traspasado sus umbrales.
Huesca ciudad de unos cincuenta y
cuatro mil almas con cuerpos y cerebros… cincuenta y cuatro mil kilos y algo
más de cerebro y materia encefálica.
Huesca que intenta como todo lo real y ciudad llegar al siglo siguiente…
No
podemos despedirnos de este artilugio que los humanos llaman artículo de
opinión, una mezcla entre las conversaciones de las comadres –palabra que no me
gusta, pero creo pega ahora- y, los argumentos y observaciones de los leídos
–esos que han leído lo suficiente-, y, que un loado equipo directivo le permite
publicar en un instrumento que se llama periódico. Hace unos meses me enteré,
que el famoso Barrio de las Letras de Madrid, donde se instalaron muchos
escritores en el siglo de Oro, se debía su interés, porque existían no sé que
Embajada o Ministerio de España o estaba el Servicio de Postas o Cartas, no
recuerdo bien, dónde se recibían informaciones de los Reinos de España, y, así
conocían noticias. No sé si será verdad.
Bueno
no se puede terminar hoy un artículo de viajes, sin citar alguna comida típica,
en este caso, hablaremos y recordamos el abadejo ajorriero. Terminamos,
sólo decirle a usted estimado lector o lectora, que visite más ciudades del
interior de la Península, porque acabará comprendiéndose mejor, porque usted
posiblemente sea descendiente de alguien, que sea abuelo o bisabuelo llegó de
algún pueblo pequeño o mediano del interior, a la gran capital o a la gran
ciudad o a la costa… Mire y verá como es cierto este aserto, como entre los
ocho bisabuelos y bisabuelas que corren algo de su sangre por usted, alguien
vino del interior de esta Península, o quién sabe, ahora de muy lejos de Europa
o de las costas del lejano mar-océano Atlántico… Paz y bien.
https://muckrack.com/jmm-caminero-1 ©
jmm caminero (26 septiembre 2025 cr).
Fin artículo 5.108º:
“Caminando por Huesca capital, I”.
E.
27 sept.