Artículo 5.128º: “Abrir libros al azar”.
Todos
los tiempos son semejantes pero cambian las tecnologías disponibles. Unos,
indican que hay que leer de forma sistemática, otros de vez en cuando al azar.
Es
como el debate o dilema entre la televisión de pago o la generalista sin pago o
sólo Internet y no la televisión. Digamos que estos son los tres modelos,
existe un cuarto que se diferencia de los anteriores, bajo ningún concepto
disponen de televisión en sus casas.
¿Qué
es lo mejor señor lector o señota lectora? Creo que la televisión generalista
aunque permite no tener que pagar, las próximas elecciones dependerán del
sector social que dispone de este medio, y, menos de los otros, creo que van a
ser el balance decisivo, pero eso es una opinión personal a ojos vistas, a uno
o dos años antes de que sucedan. Ya, ya nos dirán los entendidos lo que ha
sucedido.
La
televisión de no-pago, que desde luego ahora se ha llenado de concursos a todas
las horas, y, ya no emiten dibujos animados para niños, un error grave –sería
un modo pedagógico de enseñar a todos los sectores sociales, y, además de los
migrantes y sus hijos-. Pues creo dispone de una ventaja esencial, que te
puedes encontrar con una noticia, reportaje, crónica, programa de investigación
del que no sabías nada o apenas sabe. Creo que es el azar en este caso. No
podemos saber de todo.
El
resto de televisiones o tipos de emisiones de pago o Internet, creo que el
individuo cada vez se centra más en sí mismo. Si le gusta el deporte pues mucho
tiempo dedicará al deporte, si es al arte, muchos esfuerzos al arte o artes,
etc. Por lo cual, puede que en su vocación o profesión o afición sea cada vez
más docto, pero habrá ido dejando multitud de temas fuera de su entendimiento o
comprensión, etc. Existen muchas realidades en el mundo, y, si no permites que
al menos te lleguen esos temas, jamás conocerás su existencia. El mundo es
mucho más amplio que tu propia perceptiva…-
Pues,
pues algo semejante sucede con los libros. Existen personas que no leen libros,
a lo sumo periódicos y sus informes obligatorios de su trabajo y trabajar.
Otros, se especializan en una temática y se convierten en grandes expertos, y,
sólo leen de esa dimensión. Otros, comparten su profesionalidad en los libros y
alguna vocación o alguna afición. Y, otros, los que de vez en cuando, no sólo
leen o piensan o meditan los regimientos de palabras insertos en un libro, sino
que van buceando en el azar, el que le recomienda una amistad, el que se
encuentra en una estantería y no conocías, lo que le expresa un suplemento
cultural, una entrevista a un autor o autora, incluso el mismo azar y puro
azar, ir a una biblioteca, y, entrar en un estante o balda por azar, y, coger
un libro contando, por ejemplo, el siete lo escogeré… Es un ejercicio para ir
abriendo el horizonte de la realidad.
Cierto
es, que una realidad es cómo seleccionar un libro, otra muy distinta es
empezarlo, que eso se puede hacer, o se puede hojear, y, otra es terminarlo. Se
puede empezar un libro y no terminarlo, o, sólo entrar en el mar de palabras de
un capítulo o de algunas partes, o de las tres o cuatro primeras páginas y
alguna del medio. Y, dejarlo. Eso también sucede.
También
se puede leer un libro, algunos escritores lo han hecho, algunos los leen de
vez en cuando, pueden hacerlo tres o siete veces en la vida, en distintos
momentos, personales, de edad, psicológicos, sentimentales, económicos, etc.
Pero otros, hay libros y autores, que aunque los valoran mucho, no terminan
nunca de leerlos, al menos los fundamentales y esenciales. Porque al final, no
quieren que les influyan mucho. Es decir, no se quieren convertir en el
arbolito que está debajo del gran árbol. Y, estar luchando toda la vida para
distanciarse… ¡Ocurre esto, los literatos hablan mucho y en exceso de otros
libros y de otros autores, pero la vida es corta, hay dentro de ella muchas
obligaciones, y, no da tiempo para todo, ni para tanto…!
Por
lo cual, la costumbre de abrir libros al azar, y, entrar en ellos, aunque sean
unas páginas o unos capítulos es una cosa buena. Al final, el mundo ha
cambiado, si millones de entes mercantiles se cambian de un continente al otro,
en estos momentos. Ya, tendremos que pensar, que la gran literatura europea de
estos veinticinco siglos, la gran literatura occidental de estos treinta
últimos siglos, todas las letras en todos los saberes, ya hay que comparar lo
producido por Occidente, con lo que ha creado y criado otros continentes…
Dicho
de otro modo, ya hay que ver no sólo a Shakespeare
o Proust o Pessoa o Cervantes o Joyce u Homero, que son gigantes. Pero
ahora habrá que ver también los grandes gigantes literarios de Asia o del
Pacífico o de África. Entonces, pues todo puede que acabe teniendo otra
perspectiva… Quizás, tu gran autor o autora de tu lengua y de un siglo
concreto, ya habrá que ser matizado por otro gran autor o autora de ese mismo
siglo pero de Asia, de China, de la India, del mundo Islámico, de África, del
Pacífico…
¡Son
los tiempos, tendrás que ir abriendo el azar de leer libros, también al resto
de planeta, son los signos de los tiempos…!
http://www.facebook.com/cuadernossoliloquiosjmm © jmm caminero (18 septiembre 2025 cr).
Fin artículo 5.128º:
“Abrir libros al azar”.
E.
05 octubre