Artículo Periodístico 3.031º: “Montar un artículo o una columna”.
Existe una viñeta de Mingote, que está dibujado la
caricatura del mismo Mingote, y, debajo, pone en el bocadillo, más o menos:
“humorista buscando tema y viñeta para hoy…”.
Salvando las distancias y las
diversas realidades, que el articulista, incluido yo, yo como modesto
columnista, nos cuesta trabajo, encontrar el tema. O, incluso, de la multitud
de temáticas, no tenemos la agudeza o el valor de seleccionar cual temática o
cual título, le toca rozar con los labios de palabras hoy. Porque nos
encontramos con el género articulístico, que es enormemente universal, se
pueden redactar textos de temas históricos presentes, muy trascendentales, la última
guerra en Europa, o de los cambios de ministros, o de cómo una parte de la
población de una región están intentando secesionar un Estado, que lleva siglos
unido, o...
Pero también se puede redactar, “de
los garbanzos, de la tortilla, de mil usos y costumbres”. Y, me parece, el
tiempo me ha enseñado, que para la vida normal y rutinaria, está hecha de
jirones, como un enorme tapiz, de cuestiones de gran calado trascendental, de
las que hablarán los libros en futuras décadas, pero también, de otras temáticas,
que a multitud de personas, le interesan, cada día, aunque nadie narre nada de
todo ello. Los humanos somos unos botijos, formados y conformados de agua y
vacío y arcilla pasada por el horno del existir.
En este oficio del periodismo, del
que yo apenas entiendo y comprendo casi nada. Pienso que los periodistas de
experiencia suficiente, escriben menos de lo que saben, en multitud de temas,
y, otros, redactan textos escorados hacia un lado o hacia otro. Pero en esta
vocación humana de informar y explicar de/en/con la realidad. Están
obsesionados con el concepto de novedad, noticia, actualidad… ¡Y, llevan razón
a medias! Porque junto a la realidad del presunto acontecimiento histórico que
afecta terrible o alegremente a millones de personas, incluso, a generaciones
futuras, existen multitud de temas o de cuestiones, que todos los días dan
sombra, no a millones, sino a docenas de millones.
Redactamos artículos, con distintas
finalidades, al menos, mi modesta pluma de águila emborrachada de tinta negra y
azul con negritas, tomados/inspirados/aprendiendo de otros columnistas que me
antepusieron en esta función. Intento que nadie que entre en la piscina de
ochocientas palabras, de mis diatribas-discursos-retóricas, no pierda el
tiempo, no sienta que ha perdido un esfuerzo de cinco minutos o diez. No tengo
derecho a cercenarle trescientos o quinientos segundos de su existir,
dedicándole/llevándole/dirigiéndole a que razone-piense-sienta una retahíla de
hormigas de palabras, y, eso no le sirva para nada, ni siquiera para pensar y
repensar y sonreír y, hacerse alguna pregunta o algún nuevo dato…
El artículo, hemos indicado tiene
muchas funciones y finalidades, pero una, es hablarnos de realidades pequeñas y
medianas y grandes. Es intentar elevarnos las posibilidades de encuentros con
temas o entes o argumentos o razones o datos o noticias, que de otro modo, no
pensaríamos. Por eso, hay que tomar artículos al azar. Porque de vez en cuando,
puedes encontrarte con un tema que ni siquiera conocía usted. Que no entra en su
vida cotidiana, ni en su vida profesional o laboral, ni en sus vocaciones, ni
en su experiencia de años, ni en sus realidades, ni realidades que le hayan
sucedido a sus cercanos o lejanos, o… ¡Por ejemplo, este que estamos besando y
acariciando hoy: que es un artículo, cómo debe ser un artículo, de qué temas
debe tratar, cómo debe hacerlo…!
No sé, si dentro del sector de los
articulistas, modestamente, puedo ponerme esta pequeña medalla, muchos somos de
los últimos mohicanos, no recibimos, ni dividendos económicos, ni somos leídos
por millares de personas, supongo, que no sé si llegarán a diez, cada una de
las columnas. Agradezco a los medios periodísticos que nos permiten todavía
esta realidad. Estos artículos que tratan temas de la realidad, imaginaria o mental
o de la conciencia o de la sociedad o de cualquier ámbito o temática, y, lo
vamos trufando con trozos de poesía, de ensayo, de filosofía, de metafísica, de
la vida cotidiana, en multitud de caminos que se entrecruzan en una plaza
mental y de realidad… Un artículo es un poema/cuarteto en prosa…
Aunque, usted no se lo crea, no es
fácil rellenar este folio DINA-4 electrónico, e, irle llevando sus ojos y sus
conexiones neuronales, hacia, varios objetivos, uno, que sea consciente, que la
vida-existencia natural y social y humana y cultural, es enorme, aunque me
pasase mil años, escribiendo cada día un artículo, siempre existirán nuevos
temas, nuevos matices, nuevas perspectivas. Aunque usted no se lo crea, le
estoy llevando hacia una cuestión metafísica de enorme trascendencia: “la vida
es algo esencial, formada y conformada y preñada con mil realidades, pequeñas o
medianas o grandes”.
Le estoy llevando hacia la
concepción, de que su vida, aunque a usted le parezca sin importancia, sin
trascendencia, sin demasiado brillo. Si, su vida-existencia es esencial, para
formar todo el enorme tapiz del mundo, Sea usted, el gran hacedor de los
destinos de una patria, que está escondido en el silencio, y, que nadie lo
conoce, o está usted, en la puerta del supermercado esperando un kilo de arroz,
o esté, usted en una residencia esperando la Trascendencia, o sea usted un
niño/a que no leerá este artículo, usted es esencial, usted es esencial, tenga
una ideología o tenga otra. Eso sí, esfuércese en ser un poco más moral, un
poco más humano.
Este es el gran deber de los
humanos, ser más humanos, ser más morales. Paz y bien…
http://youtube.com/jmmcaminero ©
jmm caminero (16-25 mayo 2022 cr).
Fin artículo 3.031º: “Montar un artículo o una columna”.
E. 25 mayo