Artículo Periodístico 4.074º: “Los seis mil artículos de Juan Manuel de Prada”.
Ha
declarado en una entrevista que suele escribir una media de doscientas columnas
o artículos al año, con lo cual, si lleva treinta años de actividad, saldrían
unos seis mil…
No entro en la tradición
española, que estás conmigo o estás contra mí, o dicho de otra manera, o adulas
casi hasta la latría o adoración a otro y otros, o, por el contrario parece que
son enemigos y adversarios personales, con una inquina en palabras y conceptos,
que a uno se le pone la piel como escarpias pensando, y, eso que todos nos
dedicamos a la creación cultural, en definitiva, al descubrimiento o intento de
la invención de verdades, bondades, bellezas con racionalidad y prudencia.
Nadie piense que esa regla
anterior, haré una excepción, no pondré a Prada
como un dios, ni lo pondré como un personaje infernal del universo de Dante, sino que expresaré de antemano,
que considero que es uno de los grandes escritores de su tiempo y de este
tiempo, no sé, en qué generación debo incluirlo, porque la de la Transición me
parece no correcto, quizás, la del cambio de siglo, digamos la del 2.000 sería
más correcto.
Me dicen algunos o lo piensan
algunos, que porqué no expongo con más acidez y agriedez y venenez ideas y
enunciados de y sobre otras personas. Y, yo les digo, de todos he ido aprendiendo
y aprehendiendo, de todos, de todos y de todas. Por tanto, hay que ser
agradecido, porque si de una persona aprendo algo, al menos, debo ser
agradecido. Segundo, de todos y en todos no estoy de acuerdo, en ideas
esenciales o accidentales, pero esto es normal, no estoy de acuerdo tampoco
conmigo, con ideas y aptitudes y actitudes y actos que he ido realizando a lo
largo del tiempo, y, por eso, no cojo todas las mañanas el cinturón y me doy
disciplina, sino simplemente, me soporto y me aguanto y me quiero en mis
evoluciones correctas.
Esto es lo que hago, por tanto,
todos evolucionamos, todos nos equivocamos, de todas formas, se cazan más
moscas con miel que con vinagre y ácido y vitriolo. De todas formas a todo el
mundo se le llena la boca con las palabras de libertad de pensamiento, de
conciencia, de expresión, de rito y de mil otras maneras. Pero después, a la
hora de analizar a otros, le damos demasiada zanahoria o le ofrecemos
demasiados palos. Creo que se puede analizar la propia obra, la de los demás,
con racionalidad y prudencia, y, nadie se tiene que ofender, si yo digo que Prada quizás haya tenido etapas
demasiado crítico con algunas posiciones ideológicas, es un juicio ponderado,
no le insulto, sino simplemente realizo una aserción, enunciado, que puede
estar equivocado.
Si digo, que Prada es uno de los grandes escritores y observadores de este
terruño del que formamos parte, y, que como persona individual, tiene derecho
de pensar, se equivoque o no, que es tradicionalista, que es la formulación que
ahora hace, años atrás, indicaba otro adjetivo, si mi memoria no me falla.
Tiene derecho a hacerlo, no hablamos de libertad de conciencia y de expresión
hasta la saciedad.
Yo, pienso que cada escritor o
pintor o músico o filósofo o articulista es como una especie de animal, existen
en la esfera biológica, millones de especies, y, todas cumplen su papel. Por
tanto, el león necesita a la hormiga, y la hormiga al elefante, y, el elefante
a los cocodrilos. Todos están en la naturaleza, todos son y somos parte de esta
naturaleza. Todos debemos aprender y aprehender algo de los demás, todos
debemos saber que nos equivocamos en algo o en mucho, todos debemos estar
abiertos a una crítica racional y razonable y con argumentos y con respeto de
los demás. Es un favor que los demás nos hacen…
Escribí un artículo, titulando,
más o menos, que Prada era el Chesterton español. No sé si se habrá alejado
ahora, un poco, o se habrá debilitado sus venas del cristianismo. No soy yo,
quién para juzgar su evolución cultural, ideológica, religiosa, espiritual,
metafísica, sociopolítica, filosófica. Pero sigo pensando que es una especie de mezcla entre Chesterton y
Borges, lo digo con respeto, -aunque él ahora cita mucho a Pemán y a Castellani-, que nadie piense otra cosa, porque tengo respeto a los
autores vivos y a los autores no-vivos. Porque muchos, caen en el famoso error
que cita la Biblia, “alaban a los profetas muertos, que mataron vuestros
padres-abuelos, y matáis a los profetas vivos que están con vosotros…”. ¡Yo, yo
no deseo caer en ese error…!
Si alguien lee algunos de mis
artículos, sabe que he estado intentando hacer un recuerdo del articulismo
español de estos dos últimos siglos. Y, para eso he citado al menos a más de
cien autores, de ahora y del pasado, por lo menos, en alrededor de trescientos
o quinientos artículos. Cuando cito a Prada,
también entra en este grupo y en esta intención o finalidad…
Y, para ese recuerdo del
columnismo español, es para mí muy importante, quizás debido a la influencia
del método científico, citar cantidades y números. Citar el número de
artículos. Porque la cifra y el número, aunque sea aproximado es esencial. Por
eso, cito los casi seis mil artículos de Prada.
Yo, le sugeriría a Prada, y, a su editor o agente
literario, que fuesen haciendo un corpus de sus artículos, que fueran indexando
y catalogando. Porque podría ser un ejemplo para otros muchos. Al final, hace
unos meses se ha lanzado al mundo, una Web con los seis mil doscientos de
artículos de Joseph Plà.
Bueno es desear Paz y bien a Prada, desear Paz y bien a todos los
articulistas de nuestro terruño, porque corren tiempos demasiados complejos y
demasiados preocupantes…
http://filosliterarte.blogspot.com.es © jmm caminero (04-26 febrero 2024 cr).
Fin artículo 4.074º:
“Los seis mil artículos de Juan Manuel de Prada”.
E.
26 febrero