Artículo 5.216º: “El humor, humorismo: Pedro Sainz Rodríguez”.
Parece ser que es en el
Renacimiento la palabra humor pasa de ser una cuestión biológica-fisiológica,
los cuatro humores de los griegos a un concepto o género literario.
He leído suficiente sobre humor,
humor gráfico, humorismo. No soy un experto, ni soy un especialista, pero algo
sé, no sólo de todo el conocimiento acumulado durante décadas, en general, sino
también sobre esta temática. Y, debo confesar que la palabra humor, porque las
palabras cambian, todo cambia o todo se mueve según Heráclito, pues las palabras son unos animales juguetones que
también cambian. Cierto que a veces, las palabras son heridas y traumas muy
profundos en el corazón humano.
Pues una de las finalidades y
funciones del articulismo, es que a veces te enteras, de algo, que no lo habías
hecho/dicho en otros tratados, escritos, libros, conferencias, y, en un
artículo de opinión, me he enterado que fue en el Renacimiento cuando esta
palabra-término-vocablo-concepto de humor pasó a ser también o tener un
significado literario o, de la forma que ahora lo entendemos, como risa, sarcasmo,
crítica, sonrisa, etc.
Lo he encontrado en un artículo
de Pedro Sainz Rodríguez
(1897-1986), que lo cito aquí, porque eso de dar al César lo que es del César,
y, además, porque usted lo busque y rebusque y lo lea. Es como en la
información académica, unos textos se basan citando a otros, y, además avanzan
un poco más… un artículo titulado: Humorismo, publicado en ABC,
el día 25 de febrero de 1962. Debo confesar que este artículo me ha
proporcionado algunos datos y matices que no eran consciente o no sabía. Lo he
indicado antes. Supongo que El IQH, el Instituto Quevedo del Humor,
si mi memoria no me falla con una cátedra en la Universidad de Alcalá de Henares,
irá juntando poco a poco, no sólo todos los libros o la mayoría de lo publicado
sobre el humor y el humorismo, serán decenas de miles, y, supongo e imagino que
tarde o temprano también tendrán un proyecto de ir coleccionando, guardando,
conservando, indexando o haciendo enlaces a todos los artículos académicos y
también periodísticos sobre este tema…
Se habla que existe diversidad de
clases o tipos de humor o humorismo –sea gráfico, chistes populares, humor
literario, etc.-: satírico, burlesco, irónico, crítico, humor absurdo,
amarillo, humor azul, humor blanco, humor negro, etc. En fin que cada maestrillo
tiene su librillo, aquí sucede lo mismo.
Y, las teorías explicativas
psicológicas del y sobre el humor son también varias, en resumen: teorías de la
superioridad, teorías de la incongruencia, teoría de la catarsis, teorías del
juego, teorías multifuncionales o multicausales… en fin, éstas las respaldan
unas escuelas psicológicas sean psicoanalistas, etc.
Para mí, es un misterio y un
enigma el humor en general, el humorismo en general, y, desde luego el humor
gráfico que es en el que más me muevo, porque me he dado cuenta que en la vida
normal y rutinaria, en el lenguaje oral y diálógico, porque se puede
interpretar, no del todo de forma correcta. En las clases de humor y humor
gráfico siempre o casi siempre me he movido en un humor blanco o dulce o suave.
No es mi intención hacer heridas a nadie. Pero también entiendo, que la
sociedad debe tener un oficio y un sector que nos diga, las cosas que hacemos
mal o medio mal. Y, ese fin o este trabajo, lo hacen en gran parte los
humoristas, las cátedras universitarias también deberían hacerlo, y,
periodistas entre otros…
Pero iba a indicar, que para mí,
el humor es una necesidad muy profunda humana, tengo constancia, de que en
campos de trabajo o campos de prisioneros y, campos de concentración, no digo
siempre, pero de vez en cuando, a esas personas se reían, les surgía la
sonrisa. Es cómo si tuviésemos una profunda necesidad de reír y de reírnos
nosotros a nosotros mismos y de reírnos de los demás y de reírnos de la
situación que estamos pasando. Quizás, quizás este país, de cualquier
acontecimiento, se saca enseguida un chiste, antes era oral-popular, ahora se
exponen en Internet.
Dicen, y, es para mí un misterio
y un enigma que el grupo de personas que tenían como obligación quemar a los
judíos que acaban de morir en la industria del mal y de la muerte del gas como
método industrializado de la muerte masiva –no existen palabras para calificar
estos horrendos hechos-. Pues esas personas que llevaban a los crematorios los
cuerpos fallecidos, y, que sabían que al cabo de tres o cuatro meses, ellos
tendrían y correrían la misma suerte, pues dicen, algunos cronistas que en el
meollo y en medio del fuego de ese terror, que también se reían de vez en
cuando. Si este dato es incierto o falso, deseo que alguien lo corrija.
Pero de ser cierto el anterior
hecho, muestra y demuestra, que la risa, el humor, la sonrisa es una necesidad
muy profunda en el ser humano, en el alma y la carne y el cuerpo del ser
humano….
https://museovirtualcuadernosdelamancha.wordpress.com © jmm caminero
(10 noviembre 2025 cr).
Fin
artículo 5.216º: “El humor, humorismo: Pedro Sainz Rodríguez”.
E.
23 nov.