Artículo Periodístico 3.140º: “Vanidades y personajes”.
Dar
el valor exacto de un producto cultural, es enormemente difícil, valorar el
valor de unos hechos o unos actos o unas actuaciones, sea en el campo que sean
es muy difícil.
Valorar y revalorizar la
influencia que va a tener una realidad o una entidad, sea del tipo que sea,
cultural o social o política o económica o religiosa, es enormemente complejo.
Valorar y revalorizar y aquilatar la importancia de los actores o actantes
–como ahora indican algunos, el sujeto que está detrás de esos actos-, es
enormemente compleja.
Porque para valorar y aquilatar y
ponderar no solo hay que tener en cuenta, la combinación histórica, hasta el
hoy, de esa materia o disciplina, sino también, valorar, cosa que es casi
imposible, el desarrollo en el futuro de esa realidad o conjunto de hechos o
acciones, mezclados y combinados con circunstancias y variables y factores que
nacerán y ocurrirán en el futuro…
El maestro del articulismo Manuel Vicent,
publicó en El País, del 11 de noviembre de 1990, una columna titulada Arquímedes,
en cual analizaba y describía la vanidad y la soberbia de tantos personajes,
que se creían muy superiores, en sus oficios y profesiones, de lo que eran en
sí. “Dramatis personae”, podríamos indicar, de/en multitud de campos de la
realidad social. Quizás, el mundo moderno que exige tanta competitividad, y,
los medios de comunicación, y tan mermada han quedado las virtudes
tradicionales, de la humildad, haya producido esta eclosión de la
vanidad/soberbia/grandilocuencia y demasiados complejos de inferioridad. ¿El
hombre/mujer no se siente a gusto, de forma moderada y racional y prudente,
consigo mismo y en si mismo, uno de los grandes males del mundo actual
occidental…?
Cada sujeto, en su campo y
especialidad, quieren ser el mejor, que los laureles, en todas las formas maneras le devengan y avengan y vengan en su
persona, plusvalías económicas, sociales, culturales, afectivas, sentimentales,
mediáticas, etc. Cierto es, que también, se produce un fenómeno que no somos
conscientes, cuántas grandes fortunas económicas de este país, cuántas personas
que son los propietarios en parte o en gran parte, de grandes emporios
económicos, conocemos sus marcas, consumimos sus
marcas/productos/mercancías/servicios, pero no conocemos sus nombres, menos sus
figuras/imágenes/rostros. Por tanto, diríamos, que existen estos dos ámbitos,
en las altas esferas se esconden y se silencian en sus figuras públicas, y, en
el resto de la sociedad, en casi todos los niveles, quieren/queremos la gran
presencia…
Entremos en la cueva del
articulismo de opinión/literario/comentario/crónica, que tantos nombres tiene.
Se ve en la plaza de toros nacional, como casi todos los nombres quieren
destacar y ser y estar. Por tiempo, quienes llevan más tiempo que el resto, por
número de columnas periodísticas realizadas, por publicar en grandes medios o
en medios más modestos, por los premios recibidos a lo largo del camino, por
los dividendos económicos que les remuneran por el número de palabras, por y
por… Pero todos somos biznietos de Larra en el columnismo, alguno que sea un
poco más preciso, expresa, ser biznieto de Larra, Mesonero Romanos, Alarcón, Fernán González…
Pero la realidad es que el
articulismo tal y como lo entendemos, como toda realidad humana y social, va
cambiando y evolucionando, cada generación, debido a factores diversos, entre
otros, los tecnológicos, se van incorporando nuevas realidades y combinaciones
y estructuraciones, somos herederos, en este suelo patrio que tantos dolores y
alegrías de cabeza nos trae, que siempre estamos entre la fiestas patronales y
la corrida de toros, en la que nosotros somos los toreros y los toros, al mismo
tiempo. Aquí, el origen del articulismo unido al periodismo está en el siglo
dieciocho, al menos, en la segunda mitad, cuándo, ya se creó/inventó/produjo el
primer periódico diario, hacia la década de 1760. Nipho o Nifo, por citar a un autor, es
casi medio siglo anterior a Larra, Fernán González, que fue mujer, por nacimiento
es anterior a Larra… -sin menoscabo de la genialidad literaria del maestro
Larra…-.
Pero si somos justos, Gracián
y Feijoo,
el primero del siglo diecisiete, el segundo terminó sus respiraciones en esta
tierra, hacia 1760, si somos justos y equitativos y agradecidos, los textos que
escribieron y redactaron, estos dos
personajes-personas-escritores-pensadores-observadores-divulgadores, “eran y
hacían crónicas periodísticas”.
Gracián, podrían ser columnas o microcolumnas,
algunos de sus textos, Feijoó, algunos de sus textos, muchos de
ellos, eran verdaderos artículos de hoy –yo, un día de los santos inocentes, si
fuese director de un periódico, escogería y cogería, uno de los textos de este
autor, y lo publicaría, como de un autor actual, que se deje jugar a este
juego, y, pienso que para muchos entraría como un tema actual, con una técnica
actual-. Al final, el articulismo es uno de los géneros de la prosa didáctica,
al final, es una variedad de crónica/ensayo, al final, casi todos los
ensayistas de la ilustración, además de la estructura arquitectónica de la
filosofía subyacente, analizaban la realidad social y costumbres...
Qué hace el articulismo actual,
expresar e impresionar trozos de la realidad y de multitud de entes –utilicemos
esta palabra/palabro-, sea con una perspectiva económica, social, cultural,
política, literaria, artística, costumbres, etc.
No hacemos nada nuevo, desde hace
siglos, los articulistas de hoy, solo nos adaptamos a la tecnología de hoy, si Cervantes,
Quevedo, Góngora, Calderón, Shakespeare, Dante, Homero, Esquilo. Montaigne,
Francis Bacón…, hubiesen dispuesto de periódicos impresos en
imprenta, diarios, pues habrían escrito crónicas y comentarios y artículos y
columnas… igual o a semejanza como nosotros lo hacemos cada día o cada semana…
¡¿Qué es la Summa Theológica de Tomás de Aquino,
sino cuatro mil artículos reunidos tratando sobre todos los temas humanos y
divinos…!? ¿¡Qué hizo el Aquinate sino escribir artículos, pero con
una genialidad y humildad excelsa, cosa que la mayoría de nosotros no
tenemos…?!
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jmm caminero (30 julio-10 agosto 2022 cr).
Fin artículo
3.140º: “Vanidades y personajes”.
E. 10 agosto