Artículo Periodístico 3.446º: “Arco 2023 y los artistas fracasados”.
Raramente
al comentar estas ferias de arte, nacionales e internacionales, se habla de los
miles, decenas de miles de autores plásticos que las visitan, y su destino es
el fracaso.
Según muchos, la situación del
autor/a plástico, sea en el arte que sea, sea en el género o técnica o estilo
que sea, sea un arte o sea otro –con diferencias según las artes concretas, el
lugar, la sociedad, la cultura, el tiempo-, la inmensa mayoría de ellos y
ellas, su destino y su finalidad es el fracaso. Y, lo que hayan realizado, uno
o mil, mil o veinte mil. La mayor parte está condenada a la destrucción,
deterioro, dejación, olvido… al pasar de los años, incluso, en vida del mismo
autor plástico.
Esta es la realidad, que todo el
mundo sabe y todo el mundo comenta en exposiciones, conferencias, tertulias,
simposios, tascas, bares, tabernas… El artista, con todos los matices que se
quiera, la mayoría de ellos y ellas, están en una situación muy semejante, a la
los proletarios del siglo diecinueve antes de 1850.
No es este el lugar, ni el ánimo,
ni el fin, de echar la culpa a unos o a otros, sectores que intervienen en esta
cuestión, públicos o privados. Es, simplemente, una ley de la economía, de la
sociedad, de la producción, de la naturaleza. Alguien se pone a vender tomates,
estos son comprados, y son consumidos, se deterioran o se pudren, o se tiran
para no hacer bajar el precio. Con lo cual, con estos tres artilugios
económicos naturales y sociales, se consigue, que al mes siguiente, el sujeto
zeta si desea degustar tomates, tenga que comprar otros…
Pero el arte o las artes, en
general, -no todas las artes siguen las mismas reglas y metodologías y
estructuras-. Pero las artes plásticas, si se cuidan mínimamente, pongamos un
dibujo o una pintura en papel o lienzo o una escultura, pueden durar en el
tiempo, cientos de años. Los museos están llenos de obras, de siglos
anteriores, y, los palacios y las iglesias o y todos los templos religiosos de
todas las culturas, con unos estilos o con otros…
Con lo cual que se cumple, pues,
que muchos son los llamados y pocos los escogidos. Desde el principio, se
apuesta por unos caballos y los otros, se pasan, diez o treinta o cincuenta
años de su existencia, intentando conseguir un pequeño lugar. Pero saben o no
saben o no quieren saber, que de su generación ya han seleccionado cien o diez
o mil, a nivel mundial, regional, nacional…
Con lo cual, usted, puede hacer
todas las exposiciones en las salas alternativas o públicas, puede vender de
vez en cuando un dibujo o un grabado o
una pintura, quizás, en algún año gane algún premio, quizás, también tenga
tratos con una galería o marchante, que en el mundo de este sector, es de
tercera o quinta, o, incluso pagará por exponer en algún centro de alguna urbe
y orbe importante. O, ahora, expondrá en una galería virtual, y esperará, y
quizás, venda algo… ¡Pero no se engañe, muchos son los llamados, pocos los
escogidos… claro está, es mejor que siga usted trabajando en algún oficio legal
y moral, y siga usted pintando o dibujado o esculpiendo, que no se dedique a la
bebida o a otras cosas…!
No tengo edad, ni ánimo, ni forma
de ser, de empezar a dar puñadas simbólicas y signicas, atacando a unos y a
otros. Comprendo y entiendo, si no todo, mucho de todo. El que pone una
galería, tiene que vivir y sobrevivir, por tanto, tiene que vender. El que
compra, o, lo hace por compromiso o porque le gusta mucho una obra, o, porque
es una manera de inversión. El gran arte plástico es hoy, uno de los mecanismos
esenciales de inversión en el mundo. Se toma un dinero, que tenga muchos ceros,
se cristaliza o materializa en una obra de arte, y, dentro de diez o cien años,
se vende otra vez, y se recogen las plusvalías. Mientras tanto ha aumentado el
nivel social y cultural y publicitario de esa casa, empresa, familia, fundación
por haber dispuesto de grandes obras de arte. Hoy, el arte plástico es una
inversión económica a nivel industrial. Un elemento más de las mercancías y de
las finanzas y de los servicios… -Aunque no solo sea eso-.
Pero las entidades públicas, les
hemos sugerido mil veces, como mil primaveras, podrían realizar, al menos, Centros
Documentales Virtuales, dónde los autores que quisiesen, pudiesen enviar sus
curriculums y sus biografías y sus enlaces. Y, así, se juntarían, en pocos
meses y años, posiblemente, datos y fichas y fotografías y enlaces de miles,
docenas de miles de artistas plásticos, a nivel regional, a nivel nacional…
Sería una manera, de tener un pequeño escaparate, sería una manera, de que
tanto que se habla de Cultura y cultura, pues de verdad, se valorase la
cultura… Dirán, la mayoría de artistas son de quinta categoría, cierto es, pero
la mayoría de panaderos, bodegueros, juristas, médicos, no son merecedores del
Premio Nobel, y, tienen un lugar, en la existencia y en la sociedad…
¿Qué perdería un museo provincial
de cualquier lugar de este terruño, cualquier museo de arte local de cualquier
lagar de este suelo, que abriesen una pestaña en su Web oficial, con datos, de
cientos de autores y autoras plásticos, nacidos/habitadores de/en su
territorio, provincia o localidad, sin selecciones previas, y, tuviesen una pequeña
ficha, una serie de fotografías de algunas de sus obras, y, enlaces a sus redes
sociales…? ¿Qué perderían…? ¿Pero por qué y porqué no se hace…?
http://twitter.com/jmmcaminero ©
jmm caminero (23 febrero-01 marzo 2023 cr).
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“Arco 2023 y los artistas fracasados”.
E. 01 marzo