Artículo Periodístico 4.206º: “Qué relación con los otras especies animales…”.
Durante
siglos y, posiblemente milenios, de una manera o de otra, los humanos se han
planteado la relación que han tenido y deben tener con otras especies e
individuos animales.
No
crean que es cosa de ahora y del ahora, dentro del seno del cristianismo, si
quieren pongan filosofía y metafísica cristiana, han existido personas que han
estimado y valorado enormemente a los animales, desde Antonio Abad, Francisco de Asís, Antonio de Padua, los tres
canonizados, pero han existido cientos y “cientas”…
Uno,
siempre ha pensado que si alguien trata bien a un animal, esperamos y deseemos
que haga lo mismo con otros seres humanos. Pero la realidad, es que sí y es que
no. Hemos encontrado distintos tipos de conductas humanas. Como en todo habría
que fijar esos límites, si las personas que tratan más y mejor a los animales
también lo hacen con las personas, más que los que no tienen animales, aquí
esperamos las aportaciones de las ciencias sociales...
Por
otro lado, toda realidad es enormemente compleja, se pueden sacrificar a
determinadas especies animales, por motivos religiosos como en la antigüedad,
aunque después se consumían, o se puede hacer por motivos de supervivencia
humana. Y, hacerlo de tal modo, que se tenga un enorme respeto a ellos.
Existen
paradojas, hay quién piensa, que la migración a Occidente, no se va a detener,
no entro en este tema tan complejo, porque mientras millones de personas vean
en sus televisiones y móviles que en Europa y semejantes, los animales tienen
más derechos y dignidad que ellos, pensarán con razón que si llegan a estas
playas ellos tendrán más derechos, derechos en todos los sentidos que en sus
tierras de origen. Y, piensan y sienten y reflexionan que aquí hasta los perros
tienen veterinario, cobijo, comida pues ellos que son humanos tendrán lo mismo…
Por
otro lado, se produce una paradoja, el primer país y gobierno, según los datos
que en la memoria dispongo, aprobó una ley nacional de defensa de los animales,
después, esas elites de esos gobiernos aprobaron llevar a millones de personas
a campos de concentración y a campos de exterminio. Con lo cual, se produce una
enorme pregunta, o mejor una fábrica de preguntas, cómo las mismas personas que
crearon la primera ley estatal en defensa de los animales, supongo que los
domésticos, cómo después fueron capaces de crear sistemas que llevaron a esa
realidad, que ni siquiera tenemos palabras para describirla después de décadas.
Todo
esto, y, algunas cosas más, me han recordado al mirarme en el espejo de un
artículo de la gran articulista Carmen
Rigalt, que nos habla que el chimpancé Gregoire,
el más viejo de África, cuidado por la gran etóloga y primatóloga Godall acababa de fallecer. La columna
-demos al César lo que es del César…-, se titula: Triangulitos, publicado
en El
Mundo, el 22 de diciembre del 2008.
Redacté
ya hace unos años, un artículo en el que se indicaba según las cifras
oficiales, que existían ya en España más animales de compañía o mascota que
niños entre un día y catorce años. No entro en la complejidad de la vida y de
la existencia. Pero es cierto que si paseas por la calle, ves más personas con
móviles en los oídos o en los ojos hablando o escribiendo, más personas con
perros y perritos que niños o niñas jugueteando, según la edad. Esta es la
realidad. Como en tantos temas, no entro, señalo hechos y datos, y, ahora que
vengan todas las interpretaciones.
A
veces, pienso que los humanos estamos proyectando muchos de nuestras heridas
profundas, y, nuestras necesidades de querer y ser queridos en animales
concretos. Los animales domésticos son una psicoterapia. No digo que sea malo o
sea bueno, parece ser que es una realidad, y, si ayuda a una persona o a una
familia a sobrellevar el luto del dolor por un desamor o un fallecimiento, no
voy a ser yo, el que escriba que no se haga y no se realice.
Pero
también, uno mira y percibe, le viene a los ojos sin quererlo, que te
encuentras a una pareja de seres humanos en su plena edad madura, o en la
primera etapa, fuertes y bellos y grandes y, por su forma de andar/vestir, con
suficiente viabilidad económica, que llevan un perro o dos, a veces, de paseo,
y, nunca ni un niño, ni una niña en carrito o medio
andando-caminando-corriendo…
Es
obvio y evidente, que debemos tratar bien a las piedras, a los árboles, a los
animales, pero también a los seres humanos. Bueno, como en casi todo, aunque
seamos ateos o agnósticos o escépticos o creyentes en tal o cual
ideología-filosofía-metafísica-religión, leamos y releamos declaraciones de la
filosofía cristiana, sobre este tema, y, sobre otros, porque hasta el momento,
pienso que es el sistema teórico más ponderado y más equilibrado y más racional
y más pausado, de tal modo, que encuentra y centra esa búsqueda del sentido
común y la racionalidad y la prudencia, en todo o en casi todo. Veámoslo aunque
solo sea como una filosofía…
Al
final el cristianismo es la piedra que ha ido rodando dos milenios, y, es la
herencia de Roma, Judea, Grecia, los Eslavos y mil influencias y, por tanto, es
un sistema bastante equilibrado en los conceptos y en las prácticas que
realizamos. En el tema de los animales también, aunque usted no lo crea, aunque
usted o yo, seamos ateos o agnósticos o teístas o deístas o…
http://www.facebook.com/cuadernossoliloquiosjmm © jmm caminero (26 abril-12 mayo 2024 cr).
Fin artículo 4.206º:
“Qué relación con los otras especies animales…”.
E.
12 mayo