Artículo Periodístico 4.231º: “Realidad y ficción y Juan Luis Suárez”.
Toda la historia humana estriba
entre otras cosas, en saber interpretar de forma correcta los hechos, hechos
que constituyen lo real y la realidad, en definitiva, la verdad.
Existen cientos de miles de
hechos, estos hechos son captados por las percepciones, pero también esos
hechos son captados por el conocimiento y entendimiento. Son realidades
complejas, porque tenemos que captar trozos de realidad, que la captamos por
parte de los sentidos-percepciones, pero las interpretamos por la
mente-conciencia-entendimiento-conocimiento. Toda percepción lleva en sí, una
parte de interpretación…
Si se fijan ustedes, cada vez que
entramos u horadamos esta cuestión, se van abriendo más complejidades. De
alguna manera, la mente-conciencia humana, sea individual o colectiva, intenta
entender la realidad del mundo, exterior e interior. Lo que se suele indicar la
naturaleza a través de la mente humana intenta captar la naturaleza humana y
no-humana.
Cuánto de lo que
captamos-percibimos es real, cuánto de lo que entendemos-conocemos es real.
Cuánto es real y cuando es semificción o ficción-realidad o ficción. Esta es la
gran pregunta, no la única de la naturaleza humana y de las cosas...
Porque en las ideas-conceptos que
creemos tener y que creemos que son reales, en definitiva, que son verdaderos,
y, en las sensaciones-percepciones que tenemos y que creemos son reales y
verdaderos, cuánto de todo ello es cierto o es verdad. Porque usted capta una
piedra, y, cree que es una piedra y será una piedra, pero usted solo capta la
forma y el color y el tamaño con sus sentidos/percepciones, a eso le añade sus
conocimientos de geología, y, dice para sí, es silex o granito o arenisca. Pero
en el primer caso es una sensación-percepción, en el segundo, es una
combinación de percepción-conocimiento. En el primer, es una construcción
mental del sujeto individual, su percepción. En el segundo caso, es una
acumulación cultural de milenios, que ha indicado que esa piedra es granito o
es arenisca sedimentada…
Pero lo que la piedra es o sea
por dentro, su estructura molecular o atómica y decenas de otras características
la percepción-sensación humana directamente no la capta, ya tiene que
intervenir otras dos realidades que se completan y complementan: la acumulación
de saber, que denominamos ciencia, y la acumulación tecnológica y científica,
que denominamos tecnología. Ambas se compenetran, con telescopios y pruebas
químicas con la que somos capaces de captar y
descubrir trozos interiores de esta realidad natural o piedra.
En todas esas percepciones, y en
todos esos conocimientos, no ya sobre las piedras, sino sobre miles de
cuestiones, se plantea qué realidades o explicaciones son verdad o son
verdad-realidad, o qué tanto por ciento tienen de verdad-realidad. Esta es la
cuestión y este es el tema. Cuánto y cómo y cuándo y dónde.
Porque usted mismo me dirá que
existen diversidad de grupos de realidades, que a su vez, disponen de distinto
grado de percepción y distinto grado de entendimiento y conocimiento. No es lo
mismo digamos una realidad sea más real o sea menos, de un proceso histórico, o
de una realidad política, o de un conocimiento económico, o de una realidad
matemática, o de una explicación de la biología, o, de esas cuestiones que
entran en el mundo de la metafísica o de la filosofía o de las artes o de las
culturas en general, o, o de…
Si un cocinero de alta cocina le
echa a un cocido mucha sal o mucha azúcar o mucho vinagre o mucho perejil,
puede que el resto de condimentos sean perfectos, pero solo con esa variable
que ha sido en demasía, estropea la comida a y en todos los sentidos. A no ser,
que esa persona esté en una situación límite de hambre, no degustará ese plato
realizado por un chef de diez tenedores o de diez estrellas o de diez cucharas…
Aquí estriba la cuestión, qué de
lo que percibimos es una percepción-sensación real en cuanto al objeto que se
emite, qué de lo pensado-entendido-comprendido-interpretado o explicado de esa
percepción es cierto y verdadero. Qué tanto por ciento diríamos es realidad, en
esa percepción-explicación, y, qué no-es-real. Esta es la cuestión en todos los
temas, sea que alguien te indica un rumor sobre una persona, o que alguien te
exprese un afecto o un sentimiento, o alguien te indique una idea, o que otra
persona te cuente el futuro de la sociedad humana, o qué alguien te explique
algunas de los trozos de realidades que percibimos o que conocemos…
Todo esto me ha llevado a
pensar-repensar-recordar, casi temas metafísicos, al confrontarme con un
artículo de Juan Luis Suárez,
profesor de la Western University de
Canadá, publicado en El
ABC, del 15 de mayo del 2024 titulado: La bifurcación de la realidad.
Debo indicar que con alegría me he dado cuenta que Ortega y Unamuno y Zubiri y D´Ors, Trías no han muerto todavía, que
todavía el periodismo permite ese articulismo esencial y profundo, filosófico y
metafísico, que Savater, Albiac,
Cuartango llevan todavía la antorcha hoy, entre otros, en algunos de sus
artículos. Que el columnismo de opinión todavía está abierto, y, las rotativas
españolas, ahora electrónicas todavía están abiertas, a dar al pueblo y a los
ciudadanos, que somos todos, buenos alimentos, al menos buenas preguntas,
estemos total o parcialmente de acuerdo con las soluciones escritas-otorgadas.
¡Somos seres limitados en las
percepciones, seres limitados en los conocimientos…! ¡De ahí, la enorme necesidad
saber y conocer y entender y percibir que es ficción en la realidad, que es
realidad en la ficción, qué es ficción y qué es realidad…, que es ficción real
y que es real de la realidad…! ¡Paz y bien…!
http://youtube.com/jmmcaminero © jmm caminero (16-26 mayo 2024 cr).
Fin artículo 4.231º:
“Realidad y ficción y Juan Luis
Suárez”.
E.
26 mayo