Artículo Periodístico 4.257º: “Olvidar para vivir y sobrevivir y Berta Ares”.
Sentimos
la necesidad de olvidar ciertos hechos, pero no lo conseguimos. Deseamos no
olvidar cierto hechos, pero si lo conseguimos.
Se
ha escrito tanto, como casi de todo, de la memoria y el olvido. Memoria y
olvido que puede ser individual, familiar, social, colectivo. Se trabaja y se
destrabaja con la memoria y el olvido. Existen hechos de memoria y recuerdo que
son agradables, existen otros que son desagradables. Existen hechos que aunque
los recuerdas de vez en cuando, se van olvidando, otros que creías estaban
olvidados, solo estaban aparcados y semidormidos. Cuándo tenga tiempo la mente
y conciencia de no ocuparse de tantas cosas del presente, volverán. Volverán
hechos que hiciste o palabras de hace cuarenta o cincuenta o sesenta o veinte
años.
Como
siempre espero que todos estos temas de la vida y de las humanidades, las
ciencias sociales y psicológicas los vayan abordando y ellas, con sus
metodologías nos proporcionen reglas y normas y conceptos y datos y
fundamentos. Pero mientras tanto, tenemos que abordarlo a
pensamiento-idea-recuerdo puro solo y puro. Es decir, con la cabeza sola, con
un papel y un lápiz y recuerdos e ideas, que se han ido juntando durante años o
meses o décadas…
También
ocurre, que no todo lo que recordamos, no todo lo que nos han y hemos contado, no todo lo que nos han y hemos
narrado es cierto. Solo sabemos una parte de los hechos, y, creemos que la
interpretación es solo desde un lado. Ocurre mucho, en todos los sitios, en las
relaciones humanas normales, más en las familias en sentido amplio, mucho más
en situaciones sociopolíticas. Ahora mismo en mi terruño de Celtiberia, la
memoria y el recuerdo se está utilizando como flecha y ariete de la historia
del pasado y del presente. Y, los historiadores profesionales y universitarios
callan. O mejor dicen, dicen entre ellos, ahí están nuestros libros, acérquense
a ellos. Si desean saber más realidad.
La
historia siempre se está desvelando y velando al mismo tiempo. Como enormes
fuerzas telúricas y sísmicas y volcánicas y movimientos de placas ideológicas,
siempre se está mordiendo sobre la historia e Historia para escribirla de un
modo o de otro. Incluso, se tapan y se esconden documentos, se desean que
determinados Archivos no existan, poniendo cualquier excusa, no se bucea en
masas documentos de otros territorios, pero que intervinieron en la historia…
Pero
también está ese recuerdo personal e individual, y, ese familiar en sentido
amplio. Y, aquí también se esconde la historia. No se quiere dejar oír hablar a
una parte de las personas implicadas. En los trabajo también, se van ocultando
parte de las historias. La realidad es que vivimos en un mundo presente y
actual, pero llenos de memorias y recuerdos del pasado, en multitud de temas,
pero que en casi todo y todos están sesgados…
Hubo
un tiempo que bebía y ansiaba conocer la historia, hasta que llegó un momento
que percibí, que para todo se necesitaba un documento o un testimonio claro y
evidente, y, si es posible contrastar varias fuentes o ríos de información. Y,
me dí, cuenta que mucho lo que sucede, no quedan datos o casi no permanecen. Otros,
queda algo, en muchos se van perdiendo adrede los que quedan. Al final, quizás,
acumulando decenas de hechos contados, o medio contados se puede imaginar la
realidad. Imaginar lo real…
Cansado
estoy, que en muchos ámbitos sociales, digamos de la microhistoria –uno mismo o
el individuo, la familia, el trabajo, grupos de amistades, organizaciones de
todo tipo a nivel social, etc.-. En casi todos, se cae en dos errores graves:
no se desea saber la verdad y los hechos de la verdad, segundo, se manipula y engaña
adrede, por parte de otros individuos y de otros poderes –por mil razones,
entre otras se prefiere ser cabeza de serpiente que no cola de ratón…-.
Y,
tantas veces, percibimos y sentimos que el individuo, no perfecto, pero de
buena voluntad, en esa entidad y esa organización equis, es el malo, y, el malo
es el bueno… Cuántas veces. De ahí, aquello de Kant, solo si existe Juicio Particular, seremos capaces de que
exista justicia y Justicia, porque de verdad, conoceremos la realidad y la
verdad y los hechos y los datos. Entonces, si existe creo que nos llevaremos
muchas sorpresas, me temo, que muchos hechos se percibirán de otro modo, muchas
ideas también, muchas personas se nos caerá la máscara que tenían y que
teníamos sobre ellas…
Todo
esto, y, aún más cosas, me ha recordado, al encontrarme, demos al viento lo que
es del viento, demos al César lo que es del César, con un artículo titulado: Olvidar
para conciliar el sueño, publicado en El País, el sábado 01 de
junio del 2024, por Berta Ares,
periodista y doctora cultural, buscadora de la realidad de las interpretaciones
y de las interpretaciones de la realidad…
https://museovirtualcuadernosdelamancha.wordpress.com © jmm caminero (03-09 junio 2024 cr).
Fin artículo 4.257º:
“Olvidar para vivir y sobrevivir y Berta Ares”.
E.
09 junio