Artículo Periodístico 3.980º: “Aspirantes a escritor y Javier Cercas”.
Puede ser lo mismo y aplicable a
aspirante a escritor, a pintor, a gran empresario, a investigador, a filósofo,
a padre/madre de familia, aspirante a general, aspirante a…
Siempre he pensado, que quizás,
las personas, se vean obligadas, en aquellas adolescencias a escoger o
seleccionar o se le escoge o se le selecciona un oficio o profesión o vocación.
Y, que para muchas personas es fácil, para otras no tienen más remedio, por las
circunstancias, para otras trabajan en lo que les salen, para otras, es un
problema para ellos y ellas durante toda
su existencia…
Las vocaciones a escritores o a,
cualquiera de los mundos de las artes son difíciles y dificultosas, quizás,
como todas en la vida, porque son muchos los que llaman a la campana y pocos
los que pueden vivir y existir de ellas, menos aún, los que alcanzan un alto
grado de excelencia en sus oficios, menos aún, los que quedan para generaciones
futuras, siguiendo vivas sus obras. Pero supongo que en las matemáticas o en la
física teórica sucede lo mismo, lo único, que pueden compatibilizar su vocación
con su oficio y con su profesión. Tres aspectos que se interrelacionan, y, que
un día tendríamos que explicar.
Pero los escritores o pintores o
articulistas o poetas tienen que combinar esa vocación, que nunca termina,
salvo excepciones en oficio y en profesión. Y, armonizan esta realidad con
algún oficio o profesión, lejano o cercano a esa vocación, para poder comer las
habichuelas de cada día, o el pan, cuándo se consumía más pan que ahora –y, eso
que ahora, los panaderos en un signo de creatividad esencial y enorme, han
creado multitud de tipos de panes, y de clases de panes, cuándo harán un premio
y homenaje a los panaderos, y demás oficios, de personas, que han estado
sesenta años en esa cuestión-. Cuando en los grandes museos de Arte
Contemporáneo del mundo harán exposiciones en homenaje al pan y a otros
oficios, y, a los panaderos y a otros oficios…
Claro dirán, que es mejor que se
jubilen, para de ese modo, otras nuevas generaciones ocupen sus puestos y
puedan vivir. Pero dónde encontrar el equilibrio entre ofrecer medallas y
laureles a personas que en sus oficios han estado décadas, y, que puedan surgir
nuevas vocaciones en esos oficios y profesiones y vocaciones artesanales –en
Japón, han encontrado el equilibrio, quizás deberíamos aprender y aprehender de
ellos-.
Si es usted escritor, esté en la
escala que sea, o, si conoce alguno, con una cierta intimidad, entonces sabrá
lo doloroso y angustioso y penoso de esta realidad. Por no saber, no sabemos,
cuántos existen en un territorio determinado. Unos, dicen y dirán, que es mejor
que no se tengan directorios evidentes y claros, porque podrán obtener
impuestos, y, eso que la mayoría no sacan ni dinero para comprar agua. Otros,
indican, que en tiempos revueltos, y, todos acaban teniendo problemas
sociopolíticos, es más fácil, o sería más sencillo cazarlos en sus nidos y
cucos y madrigueras.
Pero, otros piensan, que con un
poco sentido común y racionalidad y prudencia, conocer con un directorio, un
mínimo curriculum y algunos enlaces a sus páginas de redes sociales, y,
disponer de nombres de unos cientos según territorio, divididos en personas que
se dedican al Artes y, o, las Letras o las Ciencias o las Teologías… Es bueno,
para ese territorio. Y, así, de ese modo, esos archivos, que pueden ser
virtuales, serían la base para siguientes estudios, tanto de artículos
académicos, de tesis doctorales, de conocer la riqueza cultural, viva y
existente, en el momento, de dichas realidades culturales, incluso, de
generaciones pasadas.
Que en Valdepeñas o en Santillana
del Mar o en Astorga se conozca y conozcan todos las personas que se han
dedicado, con mejor suerte o menos, al menos, una reseña en algún archivo
virtual, donde estén todos los posibles, que estén señalados, unos cientos de
pintores, artistas musicales, escritores, diseñadores, matemáticos, filósofos,
etc., que hayan nacido en sus urbes o hayan pasado por sus territorios, durante
unos lustros. Pienso que es una riqueza para la población, algo semejante como
a sus edificios arquitectónicos… Ocho mil directorios en ocho mil ayuntamientos
y pueblos de esta vieja ubre de España. Cuánta riqueza cultural que se
conocería, cuánta porque usted conoce a diez, pero en su pueblo han existido
cincuenta…
Cada escritor o escribiente o
literato o polígrafo intenta aprender de los anteriores. Recuerdo tiempos de
leerme, decenas y cientos de entrevistas de todo tipo de creadores de textos
literarios, incluso biografías. Así, de alguna manera, todo lo hemos hecho.
Para intentar aprender y aprehender ideas y conceptos del oficio. Porque en las
Universidades Americanas, en todas, existen cursos de creatividad y creación
literaria, aquí, cada uno aprende como puede o desaprende como puede. Aunque
también existen multitud de cursos privados, y, algunos públicos…
Todo esto me lo ha recordado, al
encontrarme con un artículo o columna periodística, del insigne escritor o
columnista Javier Cercas –que alguna
universidad debería empezar a plantear presentar como candidato al Nobel de
Literatura, sabiendo que Javier Marías,
ya sabe si existe Dios, y deberían haberle dado el Nobel-, publicada en El
País, el 09 febrero del 2003, titulada. Sucedáneos. En este tema,
me recuerda al concepto de Umbral,
cuándo alguna vez expresó que de joven, leía, no solo libros, sino todo tipo de
artículos para aprender el oficio y la esencia de las columnas periodísticas…
Sin saberlo, eso hemos hecho muchos, muchos que nos hemos acercado a beber de
estos manantiales, pero la mayoría, nunca nos dieron al alternativa para
redactar textos en periódicos de papel…
Todos y todas las personas que se
han acercado a este abrevadero de la creatividad y de la creación, en cualquier
saber, intenta aprender de las generaciones anteriores, y, de los vivos. Lo que
sucede, es que la mayoría de los aprendices que hemos sido, nunca hemos tenido
acceso a los vivos y vivientes del oficio. Yo, he escrito y enviado material a
cientos y miles de galeristas, articulistas, escritores, directores de
revistas, gestores de museos, críticos, otros artistas, de las formas legales y
morales, de las maneras técnicas de cada momento… Y, salvo alguna excepción, la
contestación y la respuesta es ha sido
una enorme sinfonía del silencio…
¡Ahora, ya estoy en la Tercera
Edad, me pregunto si he encontrado la esencia del artículo, del ensayo, de la
pintura, de la literatura…! ¡Pero no tengo a quién preguntárselo, ya sé, que
nadie me contestará…! ¡Solo toco la campana para que me abran la puerta, y, no
sé, si hay puerta para mí, no sé si alguna vez ha existido para mí, si tenía
posibilidades reales, de que se me abriese, aunque sea un ventanuco…! ¡No sé,
si he estado hablando en forma de escritura y pintura para las piedras… bueno,
gracias piedras por soportarme…! (Encima ahora los fragmentos de texto hay que
dividirlos para el potencial lector, pueda hacerlo más fácilmente en sus
tablets y móviles, rompes la frase por los artilugios modernos…).
http://youtube.com/jmmcaminero © jmm caminero (22 dic. 2023-01 enero 2024 cr).
Fin artículo 3.980º:
“Aspirantes a escritor y Javier
Cercas”.