Artículo Periodístico 3.651º: “No somos solo carne, no somos solo mente”.
Cada
uno, es un ser substancial y esencial e individual, pero está formado como todo
en la realidad, de distintas partes y dimensiones, “unirlas” en algo uno, es la
tarea de toda la vida…
Si
admitimos que somos y formamos una “unidad substancial y esencial” en tres
grandes dimensiones: una corporal-biológica-carnal, otra
psicológica-mental-cerebral y otra espiritual-alma, insertados en una
Naturaleza-Cosmos-Universo físico y en una Sociedad-Cultura. Nos pasamos toda
la existencia intentando integrar realidades y entidades y variables y factores
de todas esas dimensiones. Las primeras que serían la individualidad y las dos
segundas que serían como el agua del mar del pez. El pez está formado por una
mismidad biológica y cerebral-nerviosa pero insertada en un medio
natural-naturaleza. Somos definidos, de otra manera, espacio y tiempo…
En
nuestro caso somos un ser individual substancial (Aristóteles, Agustín de Hipona, Tomás de Aquino…) conformado con
estructuras biológicas y psicológicas y espirituales –para aquellos que crean
que tienen o tenemos alma individual eterna-, y, nos movemos en el mar-aire de
la Sociedad y de la Cultura –la cultura como toda la acumulación de formas de
entender y comprender el mundo, en todos los sentidos…-. Pues toda la
existencia intentamos armonizar nuestro “yo” con el “nosotros” con la
“sociedad” y con la “cultura” y, en la Naturaleza –existimos en un nicho
ecológico o natural, que forma parte de este planeta, y, dentro de un Universo
físico-.
A
veces pienso que todos los sistemas culturales y macroculturales, tienen la
finalidad de interpretar todas esas dimensiones antedichas, con cientos de
variables y factores que las forman y conforman, y, con multitud de interrelaciones
–diríamos ecuaciones…-.
¡Y,
es aquí, dónde vienen las rupturas, las dislocaciones, las desarmonías, las
desavenencias entre las realidades o subrealidades o variables del ser humano,
del yo y del nosotros o los otros, del yo y la Naturaleza, del yo y la Cultura
o del yo y la Metafísica –o, interpretaciones intelectuales o pasionales o
afectivas o emocionales del mundo y en el mundo…-.
La
gran escritora y articulista, lamentablemente fallecida hace unos pocos
semestres, Almudena Grandes, en un
libro de artículos, titulado La herida perpetua –buen título o
genial título para definir y describir lo que somos, el nosotros, España-, en
uno de esas columnas titulada: Pan y Libertad. Elogio de la Feria del Libro
de Madrid. Nos narra con su lenguaje y estética y técnica y estilo y
filosofía y antropología, algunos aspectos del yo y del nosotros, de la
constitución esencial y accidental que forma el cocido de nuestra sociedad.
Porque un individuo está en un espacio y en un tiempo. Un individuo o individua
está diríamos en esas dos realidades o ejes cartesianos, y, difícilmente, puede
entenderse sin comprender ambos modos y medios y formas y maneras…
El
hombre, no solo necesita comer salchichas y pan y paellas, que desde luego sin
esa realidad no puede emerger el árbol que lleva dentro, sino que también debe
alimentarse de cultura, de ideas, de conocimientos, de enunciados. Y, tenemos
entre todos, esta es la historia de la humanidad, ir buscando conceptos e ideas
lo más verdaderos y más buenos, buenos en todos los sentidos, buenos en lo
moral también, y, si es posible con racionalidad… Llevamos dos millones de
años, desde el homo habilis, que se
considera la primera especie humana, Lucy,
dos millones de años ascendiendo por la escala biológica de las especies, pero también,
adquiriendo nuevos modos de ser y entender y de hacer en el mundo, de sernos y
de entendernos y de hacernos en el mundo –mundo natural y mundo cultural y
mundo espiritual…-.
En
estos últimos cinco o siete décadas, desde la hecatombe de la guerra mundial
última, hemos dado multitud de grandes saltos, uno ha sido la informática, otro
la energía nuclear, otro ha sido programas de inteligencia artificial… Y, otros
muchos más. Todos esos sistemas conceptuales y tecnológicos que hemos ido
inventado o descubriendo o diseñando o imaginando nos han ido cambiando los
modos de ser y de hacer y de actuar. Los modos de entendimiento a/y, hacia
nosotros mismos y de nosotros mismos en relación con la Naturaleza.
Posiblemente,
me digo a mi mismo, la informática nueva que irá apareciendo aplicará sistemas
y, todo ese magma de conocimientos, que ahora tenemos, que no entran en los
sistemas de metodología científica. Pienso que todos esos cientos de ideas y
prácticas, de pensares y haceres, que no entendemos bien, por no entrar en la
ciencia, pienso y opino y creo y sugiero que quizás, la informática nueva, la
actual evolucionada, la informática cuántica nos permitirá comprender y
entender. Y, esos cientos de conceptos e ideas y formas de ser y actuar,
tendremos un instrumento para conocer cual es la realidad y cual es de todas
las soluciones que tenemos ante cualquier problema, encontraremos la más
verdadera o más verosímil o la más práctica…
Porque
hoy, lo que divide a los humanos, y, los enfrentan, no es la ciencia, que
cualquier cultura, admiten sus enunciados como verdaderos, sino son todos los
demás conceptos y enunciados e ideas, que entran en el campo de las humanidades
–filosofía, artes, estética, cultura en general, religiones, morales, etc.-.
Eso es lo que hay que resolver si queremos vivir en paz, en una paz mundial y
global. Si queremos sobrevivir como especie…
https://museovirtualcuadernosdelamancha.wordpress.com © jmm caminero (17-28 junio 2023 cr).
Fin artículo 3.651º:
“No somos solo carne, no somos solo mente”.
E.
28 junio