Artículo Periodístico 3.687º: “Columnistas: carreras de relevo e I. Camacho”.
Con la metáfora/símbolo y
realidad los articulistas, desde al menos, Fernán
Caballero y Larra son y somos
unos carreristas de relevo o de posta unos vamos dejando el testigo a otros.
No estoy en este género, ahora,
porque se ha extendido como el trigo y arroz en la cosecha, sino porque ha sido
un deseo desde mi, casi juventud, que se ha materializado en estos últimos dos
lustros, de una forma ya real, diríamos, la eclosión de Internet y del
periodismo digital, ha permitido que mi pluma o pincel o lápiz sea admitido en
algunos de esos medios. Cosa, que tantas veces, se olvida, hay que ser
agradecidos, como virtud psicológica moral que tanto se olvida y tan olvidada
está.
Como ahora existen enormes medios
que expresan noticias y datos, no hay que indicarlo otra vez. El periodismo ha
cumplido ese fin, pero especialmente, el de interpretar los datos y el de
opinar sobre los datos. Por lo cual, bajo mi modesto entender y comprender, el
periodismo profesional seguirá existiendo, si cumple ese triple cometidos:
primero, fijar datos y noticias. Segundo, interpretar esos datos, con razones y
argumentos y finalidades, y, tercero, si existen unos opinadores, que es una
mezcla de interpretación y comentarios, de objetividad y subjetividad.
El notable periodista y
articulista Ignacio Camacho, en el
ABC del 09 de mayo del 2008, realiza una columna, a raíz del
fallecimiento de Campmany, titulada La
estirpe de Larra. Y, como buen escritor, buen periodista, buen
columnista nos recuerda una decena de nombres, de ayer y del hoy del
columnismo. Esa evolución que pienso surgió en los comentarios de la calle de
las noticias, y, que fue pasando, después siendo escritas, a mano, o al menos
eso dicen, después, esas noticias que venían de todos los sitios, en una hoja,
fueron grabadas en madera, después, con la imprenta, y, al final, hemos llegado
por todos los procesos de sistemas de perfección de Gutemberg y linotipias,
hemos llegado al mundo del Internet.
Me ha extrañado, con el enorme
poder, que han dispuesto, algunas cabeceras, a nivel nacional, algunas en la
dimensión regional. Con un gran poder que han dispuesto, ahora, ahora dicen que
menos –pero pienso, que volverán a retomar ese poder, aunque quizás no tanto,
por mucha competencia que existan de cientos de periódicos digitales, de
docenas de redes sociales, porque los humanos, necesitamos saber qué datos son
verdaderos, datos-noticias, cuáles no, y, qué interpretaciones son o merecen la
realidad o la explicación, y, las consecuencias de ello-.
Una persona puede asistir a un
acontecimiento equis, y, con su móvil grabarlo, y, con esa noticia formar una
epidemia mundial de millones de visitas en unos minutos. Pero qué dice y qué
puede indicar y qué consecuencias puede tener ese
hecho-dato-noticia-información, eso lo tienen que expresar personas con
formación, a veces, de décadas…
Indicaba que siento una enorme
extrañeza, que periódicos, que están con nosotros varias décadas, todavía
existentes. En sus Webs oficiales, no vayan recogiendo, numerando, insertando,
indexando, los nombres de todos los colaboradores, periodistas que han pasado
por sus imprentas, ahora digitales. Cientos y miles. Al menos, una etiqueta o
una pestaña dedicada a ellos.
Y, a partir, de ese simple
nombre, y, algunos datos, quizás, insertar algunas noticias o redacciones o
escritos que hayan realizado, algunos artículos o columnas, alguna viñetas,
algunas entrevistas, algunas informaciones… Siempre me ha extrañado, todavía
quedan, vivos y existentes, unas docenas de cabeceras, que están con nosotros
más de tres décadas, hasta ciento veinte años… Es cierto que algunas cabeceras,
sus servicios documentales te indican todos los artículos publicados por algunos
autores, así el País y el Mundo, que yo conozca, también
otros, todas las columnas publicadas por Umbral,
que ha sido la base de varias tesis doctorales sobre el articulismo…
Quizás, correspondería, no solo a
la universidad, sino también al mundo de la comunicación –periódicos, radio,
televisión…-, incentivar que se hagan trabajos fin de grado, tesis doctorales,
estudios académicos, conferencias, cursos, congresos sobre el periodismo y
todos sus géneros –entrevistas, editoriales, columnismo de opinión, reportajes,
crónicas, viñetas, etc.-. Porque hoy, que es inmensa la información y las
noticias, uno, no sabe qué es verdad y qué es menos verdad, cómo hay que
interpretar esa verdad, y, cómo no, qué consecuencias puede tener y cuáles no,
quizás debido a una llamada telefónica o a una presión ha sucedido tal hecho o…
Ignacio
Camacho,
alaba a Campmany, con palabras
reales y figuradas, con metáforas y con realidades, y, nos menciona, una decena
de autores, de ayer y de hoy. Pero habría que indicar, bajo mi modesto
entender, que hoy, que mañana, Ignacio
Camacho, será uno de esos grandes egregios, notables, excelentes
columnistas que se atarán, a esa columna que viene de Fernán Caballero, Larra, Alarcón, Bretón de los Herreros, Mesoneros,
Clarín, Valera, Estébanez Calderón, Blanco White… y, todos los que vinieron
detrás, decenas y decenas y decenas.
Y, eso que apenas, en congresos,
conferencias, cursos, tesis doctorales, apenas se citan, a los cientos de
columnistas de provincias, de las regiones… ¡Paz y bien…!
http://www.facebook.com/cuadernossoliloquiosjmm © jmm caminero (08-19 julio 2023 cr).
Fin
artículo 3.687º: “Columnistas: carreras de relevo e I. Camacho”.
E. 19 julio