Artículo Periodístico 4.585º: “Julio Camba: Toda pompa me parece fúnebre”.
Frase
que se achaca a Julio Camba o/y a Ramón Gómez de la Serna, que en traducción
viene a indicar que toda fama, notoriedad, creerse superior a los demás es algo
muerto…
Durante
siglos, se valoró como virtud humana y moral y psicológica moral, incluso
virtud social, la humildad y la modestia, de los seres humanos. Quién tenía esa
forma de ser se valoraba y se ponderaba. Pero llevamos ya unas décadas, quizás
ya un siglo, que se ha ido haciendo fuerte en el fuerte de la sociedad y la
cultura y toda la vida social, que la persona que predomina o triunfa o se
valora, es aquella que muestra y dice tener mucha personalidad, mucha
presencia, mucho dandismo, y, esto en todos los oficios de la vida…
Hoy,
la personas modesta y humilde, aunque tenga en propiedad media España, o sea el
mejor cirujano del mundo, o tenga tres Premios Nobel o… eso, ya no se lleva.
Hoy, la competitividad y otros fenómenos psicosociales, está llevando a los
individuos a que intenten destacar en sus funciones y profesiones. Pero
confundimos, y, nos confundimos, alguien puede y debe destacar en su vocación,
ser el mejor empresario del mundo, pero eso no quita que pueda ser humilde y
modesto, incluso, como la mayoría, intentar alejarse de los mass media.
Hoy,
en la cultura y Cultura, para eso estamos citando esta frase, aplicada a dos grandes
escritores de este terruño celtibérico, Serna
y Camba, se les achaca este
enunciado a ambos. Ciertamente, que Gómez
de la Serna no era humilde y
modesto en sus formas, sus palabras, gestos, vestimentas, y, demás, pero Julio Camba si lo era.
Hoy,
lanzamos una nueva flecha y espada y escudo con esta idea. Volvamos a la
humildad y la modestia. Que el producto literario que haga un escritor o una
escritora, tenga la ambición de ser perfecto o de ser una obra maestra, pero
sus gestos, sus palabras, sus formas, su manera de ser y de presentarse en el
mundo, sean modestas y sea humildes. Dicen, que esto hoy no es posible, que
hoy, hay que tener la figura del dandy, estar en los medios de comunicación,
tener una imagen de marca, ser una marca, hoy un escritor o pensador o filósofo
o artista o músico o…, es en muchos sentidos una marca, igual que puede ser los
mil productos que compramos cada día…
Y,
si no eres y has formado una personalidad de marca, no existes, en el mundo de
la cultura. De ahí, que cientos de autores de artes, de diversas artes que
viven en provincias, que no están en los centros culturales geográficos, y, por
tanto, no tienen acceso a los medios de comunicación nacional no existen. O,
solo existen en sus provincias o regiones, pero nunca llegan a las grandes
editoriales, ni a las grandes galerías de arte, ni a los grandes museos, ni a
los grandes coleccionistas, ni a los grandes medios de comunicación, etc.
Durante
siglos, se incentivaba, que cada persona hiciese lo mejor posible su oficio, legal
y moral, ser el mejor médico posible para curar mejor las enfermedades, ser el
mejor rey posible para así servir bien a los ciudadanos, ser el mejor escritor
para encontrar artilugios de la conciencia humana y así encontrar verdades y
bienes que sosieguen a los hombres… pero todo eso, hacerlo y vivirlo con humildad y modestia, no
solo de palabras, sino de gestos, de realidades… Al final, todo escritor que
sepa algo de literatura, sabe como van pasando las generaciones, y, aquellas
voces que tanto destacaban, cuarenta años después, una mayoría se van nublando
y debilitando en la arena del tiempo… Poner nombres sería ingente…
Creo
y estimo, en el terreno de la literatura, cada uno ponga su campo, sea
profesional o laboral o artístico o vocacional… Es legítimo que alguien aspire
a hacer obras notables y excelentes y geniales y maestras en la literatura, o,
en el resto de saberes y artes, y, creo es
legítimo que alguien sueñe con que alguna vez le otorguen el Cervantes, le
pongan un sillón en la RAE, y, de aperitivo el Nobel de Literatura… Es más,
que sea capaz o intentar ser capaz de construir una o varias obras literarias
que pasen a la bodega de las grandes obras maestras… que perduren durante
siglos… Eso, lo puedo entender y comprender y estar de acuerdo –siempre que no
se crea que lo va a alcanzar, sino que lo intente, igual que el panadero debe
de hacer el mejor pan posible, el poeta debe intentar hacer el mejor verso
posible…-.
Pero
creo, que al mismo tiempo, el mayor genio científico, el mayor genio de la
teología, el mayor genio de la literatura, el mayor genio de la economía debe
ser y mostrarse, ser por dentro y mostrarse por dentro y por fuera humilde y
modesto. Ser humilde y modesto, porque cómo dicen en los “triunfos” de los
generales en la procesión de Roma, por sus victorias, un esclavo le decía, no
olvidemos, un esclavo le decía, “no olvides que eres mortal”.
¡No,
no olvides que eres mortal…! ¡No olvido que soy mortal…!
http://www.facebook.com/cuadernossoliloquiosjmm © jmm caminero (01-08 dic. 2024 cr).
Fin artículo 4.585º:
“Julio Camba: Toda pompa me parece
fúnebre”.
E.
08 dic.