Artículo Periodístico 4.597º: “La marquesa de los miércoles y Umbral”.
La
marquesa de los miércoles fue un personaje o invención que F. Umbral se inventó, para intentar crear un personaje y sobretodo
un artículo periodístico de opinión.
En
el articulismo personal o de opinión o literario, diferente al de análisis o de
datos, pues se pueden tocar mil temas, mil temas por mil temas, pero existen
días que es difícil encontrar un tema. Porque al final, existen dos mundos, el
exterior, los trillones de cosas que suceden, y, el interior del plumífero, que
esa mañana o esa noche, puede estar con más tristeza o más pena, o quizás, no
ha dejado al inconsciente que fluya, o tiene una preocupación y ocupación, que
como un dique no le deja que el pensar fluya libremente dentro de sí, o... Y,
no sabe qué hacer.
Creo
recordar que Umbral, una vez
declaró, que se inventó una serie de personajes, para alargar los artículos de
opinión, para tratar mil temas, de forma directa o tangencial, porque tenía que
hacer dos artículos al día, y, eso pesa, crean que pesa, uno para publicarlo en
la Agencia
Colpisa, otro para El País, y, además de hacer
artículos hay que vivir, informarse, observar, pensar, leer, comer, dormir,
estar sentado sin hacer nada…
Pero
aunque usted crea, que este artículo que está leyendo no tiene tema, si lo
tiene, estamos hablando de todo y de nada. Porque al no hablar-escribir de
nada, estamos hablando-poligrafiando de todo, le estoy intentando llevar a que
se pregunte, qué hace, cuándo no quiere hacer nada. No hablo del ocio, que es
una actividad equis o zeta. Sino esos momentos, que se detiene, la imagen los
brazos se le caen encima o por debajo. Y, se dice, qué hago hoy aquí. Qué hago
en este rato… Ahora todo se llama depresión o estados depresivos o ligeras
depresiones, antes, durante siglos, se les denominaba melancolías y estados
melancólicos.
Pero
el articulista, si es serio y sincero, y, éste de estas palabras lo es, y,
desea seguir siéndolo, no desea que usted pierda cinco minutos de su
existencia, leyendo algo que no sirva para nada. No tengo derecho a quitarle
cinco minutos de su vida, esté en el trayecto de ésta en que esté, cosa que no
se puede saber, si está al principio, en el medio o al final. Bueno por
probabilidades, todos pensamos si estamos en uno de los trozos.
Casi
todo el mundo, o cae en el error de darse demasiada importancia, o en el otro
extremo de darse poca. Encontrar el equilibrio medio, es, quizás la sabiduría
de nuestro tiempo y de todos los tiempos. Vivimos tiempos convulsos, todos los
son. Acaso la caída de Roma en varias generaciones no lo fue. Ahora, se dicen,
algunos está cayendo la cultura de Europa, la caída de Europa. Si esto sucede,
no será en varias generaciones, después, quizás, vengan los analistas, y, nos
dirán, les explicarán o dirán, cien razones. Pero ahora, que estamos en el
proceso, no podríamos revertir algunas de las razones para que no sucedan…
Me
digo a mi mismo, debería hacer los artículos más fluidos y más volátiles, me
tendría que inventar la marquesa de los sábados, como el maestro del columnismo
Umbral, tendría que empezar a poner
diálogos, debería insertar algún poema de cuatro versos, aunque fuese no
demasiado bueno, debería meter más carne con nombres y apellidos en el asador,
y, no tanta abstracción, debería…
Me
gusta cuantificar los hechos y datos y cosas, porque creo que es el primer
esbozo de entender una realidad, de cualquier realidad, no es lo mismo la
persona que ría a carcajadas, varias veces, al día, que aquella otra, que solo
lo haga alguna vez al mes. No es lo mismo la persona que suela sonreír, varias
veces al día, que la que apenas lo haga una vez a la semana. Pues no es lo
mismo que supiésemos en este siglo, o ahora mismo, cuántos articulistas de
opinión en nuestro terruño existen, articulistas que al menos publiquen una columna
a la semana. Porque nos daría una idea, aunque sea aproximada para entender y
comprender mejor el mundo. Este mundo en el que vivimos. Porque qué hacen los
articulistas de opinión, sino dar opiniones, solo opiniones sobre mil temas,
mil opiniones sobre mil opiniones. Por ejemplo, sobre la marquesa de los
miércoles…
Hagamos
hoy, una columna periodística más corta, con menos palabras. Porque al final,
me temo que el lector/a no sabe de que estamos hablando-escribiendo. No sabe
que estoy obligándole a que cuando no tenga ganas de no hacer nada, deje que su
mente y su cuerpo descanse. Descanse, tiene derecho a no hacer nada, durante
unos minutos –pero no pasarse días sin hacer nada-. Y, por otro lado, para que
voy a continuar hablando de la marquesa de los miércoles, si yo no conozco
ninguna marquesa de los miércoles, ni de los jueves, ni de los sábados…
http://www.facebook.com/cuadernossoliloquiosjmm © jmm caminero (08-15 dic. 2024 cr).
Fin artículo 4.597º:
“La marquesa de los miércoles y Umbral”.
E.
15 dic.