Artículo Periodístico 3.204º: “Umbral y Lagunas de Duero”.
Se
analiza algo de la vida de un ser humano y, se conoce algo de la vida de todos
los seres humanos. Francisco Umbral, como toda persona, es persona y personaje,
misterio y enigma.
Podríamos indicar y expresar, que
el interés por la literatura y la filosofía y la metafísica, me ha llevado
desde siempre, al interés por el articulismo de opinión o literario, desde muy
joven. Es más, siempre he querido percibir letras firmadas por mí, en los
medios de comunicación. Pero cuando el reinado de la información era en papel,
nunca mi pluma tuvo mentores, a ningún nivel. Cuando el paradigma ha cambiado,
y existen, las redes de bits de información, algunos medios me han abierto la posibilidad
–cosa que agradezco a los equipos directivos y a la tecnología…-.
Ese
interés, por el periodismo de opinión o literario, me ha llevado a inmiscuirme
en las grandes figuras en este género, mitad literatura, mitad
periodismo, mitad filosofía, mitad metafísica, mitad… Y, al final, pues tienes que llegar a los grandes nombres que
han ocupado un trozo de tierra-árbol en estos doscientos años solares. Y,
uno a quién siempre tienes que arribar
es el señor don Francisco Umbral, con sus
luces y sus sombras, como todos los seres humanos, sean escritores o
científicos o filósofos o agricultores. Todos
padecemos y compadecemos en el color/dolor de algo de lo que somos o
representamos ser o estamos o representamos estar.
Umbral, que
pienso, es uno de los grandes escritores de la segunda mitad del siglo veinte,
en el idioma que practicó y usó y fue usado por él. Pienso
que, si somos objetivos, y, olvidamos su carácter un poco ennegrecido, es
comparable su escritura a la misma altura de los clásicos de estos últimos
cinco siglos, en el idioma o lengua del Mío Cid.
Pero mucho de lo que fue Umbral, mucho del dolor y de las alegrías que
sufrió, mucho de sus moralidades e inmoralidades, a mi entender, se centra, en
lo que a eso niño de forma consciente e inconsciente, le pudo suceder en
Lagunas de Duero. Por muy bien que fuese tratado, debemos aceptar, que fue
una situación compleja. Diríamos que ese niño o niña, como todos y todas, es
esencial el periodo, desde el momento de su concepción, su etapa epigenética,
hasta la adolescencia. Todo ese viaje interior y exterior.
Es cierto, que nadie tiene que
contar su intimidad, sus hechos y sus palabras y sus deseos. Pero si alguien es
una figura pública, quizás el resto de seres humanos, tienen derecho a un
cierto grado de conocimiento del personaje, para entender y comprender sus
palabras y sus hechos. Quizás, el
escritor o pensador o filósofo, a semejanza del gran empresario, tiene el
derecho a la intimidad más absoluta. Pero si alguien redacta, una gran
parte de sus textos, narrando trozos de su vida, quizás, el resto, tengan
derecho a conocer más de esa vida, para
entenderla/comprenderla/estimarla/valorarla. Ya que él o ella, voluntariamente,
la ha puesto en el teatro del mundo, con ella ha hecho literatura. De todas
formas no sé…
Pienso que a Umbral, jamás será entendido con más claridad, si no se conocen, seis
subperiodos existenciales: uno, su estancia en Lagunas de Duero, y en qué
circunstancias, qué familia y en qué familia fue recogido, entre tantos
reportajes que se han hecho, -desconozco, si alguien ha ido a buscar a
herederos de esa familia que lo cobijó…-. En segundo lugar, su estancia en
Valladolid, en casa de sus abuelos y de su madre, ese periodo, que se indica,
que no sabía que su tía May, era su verdadera madre. En tercer lugar, ese
periodo, desde ese conocimiento que pasó en Valladolid, fue creciendo, y si
situación de escolarización o no, y, los periodos diversos. Cuarto, su
situación de trabajo en el banco, y su relación con el Norte de Castilla, y,
después, quinto, su estancia en León. Y, sexto su llegada a Madrid…
Pienso
que merecemos de Umbral más aclaración, pienso que uno de sus errores graves,
es no haber sido capaz, quizás no haber tenido el espíritu, la fuerza y el
valor, de narrar, los datos concretos y reales que recordaba, de su infancia,
hasta los veinte años. Contar la verdadera historia, de sus
recuerdos, de sus interpretaciones. De sus tiempos diversos: Madrid, Laguna del
Duero, Valladolid, León, Madrid. Pienso que si le hubiese hecho, si lo hubiese
dejado inédito, pienso que aclararía mucho de sus sombras y de sus luces.
Porque un escritor, no solo muestra un mensaje con sus palabras, sino con sus
hechos y con su vida. Pienso con son farolas, los grandes que pueden quedar en
la historia y para la historia, para muchas personas, para muchas generaciones
posteriores. Cuánto agradeceríamos saber
más datos verídicos de Quevedo o Lope de Vega o de
Cervantes… Cuánto sería de bueno para todos.
Espero
y deseo y sugiero, a la santa viuda de Umbral, España,
que antes de su tránsito, tenga el valor de que redacte todos los datos
biográficos de Umbral, que él le indicase o contase. Que
narrase, en cien o en mil páginas, multitud de datos que podrían servir para
entender y comprender mejor su persona, para entendernos y comprendernos mejor
a nosotros mismos. Para comprender mejor una vida, la de Umbral, para
comprender mejor algo de todas las vidas. Sería el gran homenaje. Si no lo
hace, ya muchas realidades quedarán en el silencio y en el misterio, y, por
tanto, nunca se conocerán muchas variables de la ecuación…
Muchos seres humanos, no sabrán
interpretarse, porque un gran escritor, no tuvo el valor, de narrarnos, sus
verdaderos recuerdos, de sus setenta y cinco años… Aquí mi homenaje a Umbral
escritor y escribiente con/en sangre y tinta, en alguna de sus seis máquinas de
trocear el mundo con palabras… ¡Aquí, también mi homenaje a su esposa durante
décadas…! ¡De todas formas, cada vida, es un pequeño o gran misterio, que nunca
terminamos de conocer o entender, esta es la condición humana, o una de ellas…!
¡Paz y bien…!
http://articulosperiodisticosjmm.blogspot.com.es ©
jmm caminero (24-28 sept. 2022 cr).
Fin artículo 3.204º:
“Umbral y Lagunas de Duero”.
E. 28 septiembre