Artículo Periodístico 4.142º: “Nulla dies sine linea e Ignacio Agustí”.
Sentencia
que procede de Plinio el Viejo, que
se le atribuye al pintor griego Apeles
de Colofón, que significa ningún día sin pintar una línea, y se ha
extendido a la escritura, etc.
Recuerdo de joven haber leído
esta frase en Sartre, como ejemplo,
de escritura permanente y constante, pensando que con la línea-escritura o
línea-escrita se cambiaría el mundo. Después ya en su vejez, en otra
entrevista, si no recuerdo mal, pasó a la desesperanza, pensando que las líneas
no cambiaban tanto. Quizás, deberíamos reflexionar que algunas líneas e ideas y
frases han cambiado el mundo, ahí están grandes ideas sociopolíticas o
socioreligiosas, y, unos cientos de líneas siguen modulando el mundo. Ahí está
que determinadas ecuaciones fisicomatemáticas están cambiando el mundo.
Quizás el misterio del mundo, de
la línea sea en escritura o sea en pintura o sea en cualquier otro saber
humano, es que creamos los humanos es verídica y verdadera y verdad. Esta es la
cuestión, que las líneas sean verdaderas y buenas-útiles y
buenas-bondadosas-morales. Este es el misterio de la línea… sea de color o sea
de palabras o sea de sonido o sea de sabores... O, al menos se aspire a ello.
Ignacio
Agustí.
En este recoger algo del
articulismo y columnismo de este terruño ibérico, que es inmenso, aquí hay una
riqueza enorme, pero al menos, recolectar algunos textos de algunos autores y
autoras, me he encontrado con uno titulado: Ningún día sin línea,
publicado en Tele/Express, el día 29 de septiembre de 1964 por Ignacio Agustí (1913-1974), que fue
dentro de la escritura varios oficios y varios géneros. Debo indicar que como
tantos escritores, según los datos que manejo pues está un poco en el
purgatorio de los escritores literarios y de los articulistas.
Levanto otra vez la voz, aunque
ya se está haciendo algo, que aunque sea por regiones, se vayan haciendo directorios
de escritores y de columnistas y de pintores y de músicos y de otros oficios
culturales, de ayer y de hoy, solo es una ficha, quinientas palabras, una
entrada y una descripción y unos enlaces, al menos.
Taxonomías
o clasificaciones.
En nuestra sociedad, dicen que
existen dos tipos de humanos que se dedican a la cultura, aquellos o aquellas,
que quieren hacer y hacerse una imagen de marca, y, esa imagen es la que
proyectan y presentan ante el mundo: Dalí,
Umbral, Cela, Serna y aquellos que tienen un perfil bajo, intentan no crear
una imagen de marca, sino más bien un silencio creador, aquí estaríamos la
mayor parte de los autores, en todos los campos, y, que van alcanzando diríamos
la notoriedad algunos, más bien solo exclusivamente a sus producciones
culturales, aquí tendríamos, siempre se dice a Miró, Delibes, Buero Vallejo…
Diríamos que son dos modos de
proyección en el mundo. Unos, dicen que es necesario meterse vestido y con
traje en una piscina de la costa de su época, como parece ser hizo el genial Cela, porque de lo contrario las mentes
y los pueblos olvidan y obvian la situación de la producción cultural. Porque
el pueblo español, dicen, compran poco arte, compran pocos libros, compran
pocas entradas de obras teatrales y pocas musicales. Entonces, el creador o
autor, también autora tiene que intentar atravesar los medios de comunicación,
para estar su nombre en el candelero, como las marcas de moda o de comida o de
vehículos…
Cierto es que hemos asistido al
espectáculo, creo que es una postura más racional y más comedida, de algunos
autores en Europa y Norteamérica, que han prohibido que sus fotografías anden
por los cables electrónicos del mundo, y, que no han realizado ninguna
entrevista en casi toda su vida. Es decir, son dos modos de ser y de estar.
Análisis.
Creo que hoy, usted va al
supermercado de su esquina, compra diez productos, y, usted no conoce, al
final, quién es el rostro del dueño o los promotores de esas mercancías. Usted
está, lleva años comprando, lustros o décadas, y, no conoce el rostro y la tez
y la cara y las narices de qué forma son de las personas que son y tienen la
propiedad de las acciones de dichas empresas, que por lo general, serán
comandadas en una Sociedad Anónima que a su vez, tendrán parte otras sociedades
anónimas, y, ahora si son grandes y mastodónticas, ya entran en parte en fondos
de inversión. Esto es como funciona la economía…
Pero si se conocen, por unos años
o unos lustros, los ojos y las palabras y las miradas y las supuestas
ideologías de los que crean cultura. Pero llega el tiempo, después, de la marca
y del marco y del Último Viaje, y, ocurre lo de siempre, se van olvidando sus
figuras. Da lo mismo, en general, que alguien haya escrito diez o cincuenta
libros, de distintos géneros, haya escrito mil o diez mil artículos en prensa.
Todos se van olvidando…
Conclusiones.
Aquí, aquí en este artículo,
quiero recordar a Ignacio Agustí, y,
también que la sociedad recuerde y rememore a tantos cientos de articulistas y
escritores y pensadores y músicos y de mil otros saberes, hombres y mujeres,
que como los jardineros cada día, estuvieron llenando la vida de colores y
olores y sabores y palabras, y, que nos hicieron, intentaron hacer la vida más
agradable. Recordemos también a tantos oficios y profesiones modestas, que son
la arquitectura de la vida diaria y cotidiana y sin ellos, el mundo sería de
otro modo, sería menos agradables. Paz y bien y generosidad.
http://articulosperiodisticosjmm.blogspot.com.es © jmm caminero (28 feb.-08 ab. 2024 cr).
Fin artículo 4.142º:
“Nulla dies sine linea e Ignacio
Agustí”.
E.
08 abril