Artículo Periodístico 4.172º: “El éxito y el fracaso de la Ilustración”.
No
hay Congreso o Jornadas de Filosofía que algún ponente indique que la
Ilustración ha fracasado, que ese movimiento cultural filosófico y
científico-técnico ha fracasado.
Creo
que este aserto o enunciado que se expone de mil modos y mil maneras, en cualquiera de las
Jornadas Filosóficas y, a veces, de otras ramas de las Humanidades, también de
las Ciencias Sociales es un enorme error, de principio, de intermedio y de fin.
No
digo, que todo esté bien, y, que todos los parámetros derivados de la
Ilustración hayan sido correctos, pero indicar que ha sido un fracaso completo,
es, es simplemente no mirar la realidad. Y, los vectores y factores de la
realidad, todos admirarlos y tenerlos en cuenta en solo lo negativo, y, no
suficiente analizar las variables positivas e incluso las negativas relativizarlas.
Es
cierto que la tecnociencia nos ha llevado a un enorme poder, entre otros la
capacidad de aniquilarnos a nosotros mismos, especialmente, porque los
fundamentos de todas las culturas son sistemas de ideas, ideologías, de un tipo
y de otro, que están basadas en milenios de evolución, y, no se entienden entre
ellas. El grave problema, o uno de ellos, de la humanidad actual, no es la
Ilustración, sino es la falta de Ilustración todavía, en muchos territorios
culturales y geográficos ideológicos del mundo.
Las
culturas con sus fundamentos, las ideologías seculares y no seculares, una
veintena en total, de las más importantes del mundo, no se entienden entre
ellas, y, como no se comprenden entre ellas, no se toleran entre ellas, no son
capaces de evolucionar entre ellas y con ellas, los hombres que creen en ellas,
se enfrentan entre sí, pero ahora, no es una tribu contra otra tribu, ni una
aldea contra otra aldea, ni una ciudad-Estado contra otra Ciudad-Estado, ni un
imperio antiguo contra otro imperio antiguo, ahora es un continente geográfico
y cultural y metafísico y político y económico contra otro, pero que además,
que tienen la capacidad de NBQ. Es decir, el reloj del Apocalipsis y del punto
final, siempre está al límite, y, además con la tecnología y la demografía
mundial que disponemos.
La
Ilustración como movimiento cultural, sin ser perfecto, que no lo es, no ha
fracasado, ha triunfado. El problema de la Ilustración es que tiene dos tipos
de graves deficiencias: que todavía cientos y miles de millones de seres
humanos viven en sistemas ideológicos y culturales y metafísicos y
antropológicos que no se han sometido a si mismas a un proceso de Ilustración,
que Occidente tardo varios siglos.
Y,
en segundo lugar, no es que la Ilustración haya fracasado, sino que hay que
continuar profundizando en ella, una “Nueva Ilustración o Neoilustración”, en
la cual todos los saberes, se coordinen para analizar mejor todas las
realidades. Que los saberes humanísticos sean analizados todas sus cuestiones a
la luz del saber ortodoxo, y de las ciencias y ciencias sociales. Y, que todas
las ciencias y ciencias sociales, en temáticas concretas sean capaces de
coordinarse para tener ideas y conceptos más acertados, tanto humanísticos,
como desde los saberes científicos –matemáticas, ciencias naturales, ciencias
sociohumanas…-.
Hemos
pasado de mil millones de personas en tiempos de Napoleón a ocho mil millones en estos momentos. Los humanos hemos
pasado, al menos en Occidente, de vivir una media entre cuarenta o cincuenta
años, a ochenta. Hemos sido capaces de curar y curarnos de cientos de dolencias
y de enfermedades. No somos conscientes de la enorme cantidad de niños que se
morían antes de los cinco años –todavía en algunas zonas del mundo continua
sucediendo-, no somos capaces de recordar las mujeres que se morían en los
procesos de los partos –y, en algunas zonas del mundo sigue sucediendo…-.
La
Ilustración ha sido un gran éxito, jamás la inmensa mayoría de individuos, en
todas las zonas del mundo, tienen tantos derechos teóricos como actualmente,
incluso en sistemas no-democráticos, cierto que no es lo mismo en unas zonas
que en otras. Jamás, la inmensa parte de la población, al menos occidental,
cada persona tiene tantos derechos en la práctica como tenemos ahora… Jamás,
las mujeres, en casi todas las zonas del mundo han tenido tantos derechos
teóricos y prácticos como ahora, especialmente en Occidente.
Por
tanto, la Ilustración no es que haya fracasado, sino que está todavía a medias,
que hay que seguir profundizando y extendiéndola y abriendo nuevos principios.
No es que la Ilustración ha fracasado sino que se debe extender a todos los
continentes geográficos y culturales e ideológicos y metafísicos del mundo. No
es que la Ilustración haya fracasado sino que tenemos que abrirnos a nuevos
procesos de Neoilustración, sin negar que las tradiciones de cientos de
conceptos e ideas y prácticas que durante siglos han servido, puedan seguir
funcionando, adaptándolos y reviviéndolos y resucitándolos, no hay que
destruirlos todos… Porque las hecatombes del siglo veinte que sucedieron, no
fue por la Ilustración sino por falta de Ilustración, y, por falta de la “buena
moral heredada de siglos y milenios…”.
Si
usted sigue diciendo que la Ilustración ha fracasado, porqué no le pregunta a
su bisabuelo hace cien años como vivía, aquí en Europa o en cualquier lugar del
mundo, y, como vive usted, aquí en Europa o en cualquier lugar del mundo. No
hemos llegado al paraíso, pero tampoco estamos en el infierno… y, en eso la
Ilustración y todos sus movimientos algo han contribuido…
https://museovirtualcuadernosdelamancha.wordpress.com © jmm caminero (13-22 abril 2024 cr).
Fin artículo 4.172º:
“El éxito y el fracaso de la Ilustración”.
E.
22 abril