Artículo Periodístico 4.168º: “¿Existe demasiado rencor en la sociopolítica española?”.
La
cuestión es enormemente compleja y difícil: ¿pero existe en estos meses y años
últimos demasiado rencor e inquina y exabruptos en la sociopolítica española?
No
he utilizado el término política, sino sociopolítica. No achaco este problema o
esta cuestión solo a los políticos y clase política en activo, sino en general,
en la sociedad, existe demasiado rencor e inquina y odios y agravios y
recuerdos y traumas y heridas que parece vienen de la noche de las cavernas en
la situación sociopolítica actual.
Por
otro lado, parece que la sociedad, está asustada, temerosa por lo que pueda
suceder, por la hibridación de diversas crisis: crisis económica o al menos
mucho desempleo, y, otros problemas de vivienda, etc., crisis políticas de
diverso orden, pero algunas tocan la esencia del Estado, crisis morales y
crisis espirituales… y, algunas más, que hacen que la sociedad se nota está
temerosa y tiene temor y tiene miedo, y, está con las expectativas temiendo lo
peor, esperando lo mejor.
Y,
esto, da la sensación que se nota, a veces, cuando existe un fin de semana
largo, salen millones de personas a las carreteras, es como si desearán olvidar
las situaciones cotidianas. Pones en funcionamiento los sistemas audiovisuales
de comunicación, y, enseguida hay un tema o dos o tres cada semana, algunos
continúan meses, de reyertas, de controversias, de polémicas, de diatribas, y,
a veces, de malas palabras…
¿Hemos
perdido, metámonos todos, aunque de momento el pueblo, creo que está callado y
a la expectativa, no tanto en los ámbitos privados, hemos perdido el sentido
común y racional y en la sociopolítica actual en la Piel de Toro…? ¿Estamos
asustados en el corazón, por si se forma otra vez, otro lío y termina como el rosario
de la aurora, o, partes de la población en pocos años, notarían que el Estado
del Bienestar se vería afectado, porque una parte del Estado no podría mantener
esa realidad, que creíamos se había consolidado, por los cambios que parece ser
se avecinan…?
¿Se
ha caído en un torbellino, de esos que los historiadores hablan, que cuándo se
producen cambios, cambios esenciales en una sociedad, país, Estado, lo hemos
visto muchas veces en la historia, los acontecimientos pasan de una situación
más o menos estable, a una situación inestable en muchos frentes y temas, y, al
final, un cambio total y radical en la organización de la sociedad y del
Estado…?
Puede
que el ciudadano normal y típico, como es éste escribiente de este artículo,
está temeroso porque siente, aunque no conozca del todo, que algo en el fondo
del Estado se está removiendo, y, eso sin contar las problemáticas exteriores
al Estado español, a las situaciones en el Mediterráneo, siempre problemáticas,
y, también en la situación de Europa, ahora enormemente complejas. Y, eso sin
contar con la crisis económica que se encabalgan década tras década, por
ejemplo la vivienda, afectando a millones de personas, en mayor o en menor
grado, y, además de las crisis morales y espirituales que sufrimos, que de este
tema nadie habla, pero que creo está en la raíz de todo…
No
voy a utilizar la palabra polarización, que es un seudónimo o eufemismo, por no
decir, radicalización. Sectores de la sociedad, de la política, dicen que altos
sectores de la economía y economía-política y política, de algunos territorios
se han radicalizado, y, por tanto, han llevado a otras partes de la sociedad, a
hacer lo mismo.
Es
cierto, que deseamos y esperamos que esa presunta o real radicalización sea de
un nivel suave, que no se amplifique. Esperamos que la gran empresa española,
las docenas de grandes empresas, tiren de las cuerdas y de los bozales de todos
los entes, y, esto no se descabalgue. Espero y deseo y esa es mi esperanza, que
la gran empresa española, ponga orden o sentido común o racionalidad en todos
los acontecimientos que están sucediendo, que ellos con sus dineros y sus
poderes múltiples, digan a unos y a otros, que de ahí, no deben pasar. Esa es
la esperanza, aunque no lo crean, de muchas personas, que todos los días van
andando a trabajar o en metro. Incluso de personas, que pueden estar en
posiciones ideológicas en contra de las altas elites de la economía nacional o
mundial. Y, esta es una realidad no la olviden… ¡Y, esto es un síntoma de la
preocupación que anida en millones de corazones, aunque no lo digan…!
¿Qué
hacer para poner calma y sosiego a la sociopolítica española…?
Se
me ocurren tres cosas entre otras: primera, utilicen bien los adjetivos y
sustantivos, no insulte nadie. Y, nadie es nadie. Olviden las voces y los malos
gestos, solo razones y datos. Segundo, suavicen las demandas de sus corazones,
no exijan a la otra parte, algo que no pueden soportar, no exijan cambios
radicales y graves. Tercero, intenten dominar las heridas y traumas que han
heredado de décadas anteriores, de abuelos y bisabuelas. Paz y bien. La paz es
la esencia de la riqueza de todas las riquezas, y, la no-paz el padre-madre de
todos los males…
https://museovirtualcuadernosdelamancha.wordpress.com © jmm caminero (11-22 abril 2024 cr).
Fin artículo 4.168º:
“¿Existe demasiado rencor en la sociopolítica española?”.
E.
22 abril