Artículo Periodístico 3.948º: “Hablo con y a una IA del futuro”.
Hace
tiempo que ya existían indicios de que iba a suceder este descubrimiento e
innovación humana, que en distintas fases terminará entendiendo este artículo y
este texto.
Hace unas décadas un sistema
informático o programa informático fue capaz de ganar a un campeón de ajedrez,
desde ese momento, desde que me enteré de esa información, y, uniendo
posteriormente a otros datos e ideas y conceptos, Hawking, por ejemplo, fui consciente, de que tarde o temprano la IA, Inteligencia Artificial-Electrónica-Informática,
adjetivos o nombres que me gustan más que artificial, sabía que sería una
realidad. Pero creía, que vendría después, dentro de unas décadas, y, que esta
realidad, aunque sea en la primera fase, no entraría en mi conciencia de mi
tiempo y en el problema o cuestión o dilema de mi época.
Incluso en un sistema actual, de Big Data, ya que millones de
ordenadores, y bases de datos están interrelacionadas y conexionadas, y, un sistema binario de sistema informático,
un sistema clásico –sea superordenador, sea un paso más desarrollado de los
actuales-, sin entrar en los ordenadores
cuánticos, que ya serán la revolución completa en estos temas –cuándo sean
realidad, dentro de unas décadas, o más desarrollados que ahora-. Ya estamos
ante una situación compleja y diferente y diversa a todas las ocurridas en la
historia de estos dos últimos millones de años, desde que somos humanos, y,
pasando por las docenas de especies que hemos ido atravesando hasta ahora...
Un sistema informático de
interpretación de la realidad, que está conexionada a millones de bases de
información, puede llegar más lejos, que lo que nosotros podemos construir.
Nuestra memoria e inteligencia individual es limitada, tiene una capacidad de
acumulación de datos, y, por consecuencia, una limitada capacidad de
“innovación de nuevas ideas”, sea en el tema que sea. Pero un sistema
informática de inteligencia, tiene acceso a millones de datos y de bases de
datos, a una memoria acumulada enorme e ilimitada casi.
Cuándo sea capaz ante una
cuestión equis, dilucidar, qué afirmaciones, datos, argumentos, razones,
razonamientos, hechos son verídicos o verdaderos. Segundo, cuándo sea capaz de
interrelacionarlo entre ellos. Tercero, cuando sea capaz de deducir-inducir
nuevos. Entonces, habrá, si es que ya no lo ha hecho, será capaz de “innovar no
en un tema, sino en miles o en cientos de miles…”. Puede que toda esa
información que deduzca o induzca, como ahora, en los programa simples que
disponemos, nos ofrece y nos ofrezca un nuevo texto legislativo, literario, un
artículo periodístico, o un nuevo dibujo, o un diagnóstico médico –y, la mente
humana, después dilucida si es cierto ese veredicto o no lo es-.
Pero en este caso, habrá dado ese
paso que puede llegar a nuevos conocimientos e ideas, por sí sola. Y, lo tendrá
almacenada. Nadie se lo ha preguntado que responda. Sino que por el mismo, lo
hará. O alguien, le hará una pregunta, y continuará con ella, hasta un límite
sin límite. Alguien le hará o propondrá un problema y dará una solución, pero
puede que continúe por si sola, buscando nuevas respuestas, nuevas soluciones,
nuevas demostraciones, nuevas interrelaciones con otras cuestiones afines,
hasta un grao ilimitado de preguntarse y de intentar conocer y saber…
Pero también, imaginemos que
tenemos dos programas informáticos de inteligencia, uno situado en la Patagonia
y otro en Alaska, con suficiente capacidad de procesamientos de datos, de
preguntas, de cuestiones. Y, ambos empiezan a funcionar. Y, ambos alguna vez,
se encuentran. Ambos, a preguntas, que ellos mismos se hacen, o a preguntas que
los humanos les hacemos, siguen con ellas, dando respuestas, o continuando
respondiendo a ellas, en su evolución. En un trabajo intelectual sin descanso.
Y, en un momento ambos se conocen o ambos se interrelacionan… Hemos dicho dos,
pero pueden ser tres o diez o cien o mil…
¿Qué sucederá cuándo dos sistemas
de IA, Inteligencia Artificial o electrónica o informática, aunque estén a diez
mil kilómetros de distancia entren en contacto…? ¿Qué sucedería entonces, se
dejarán uno a otro, conocer los conocimientos o ideas o fórmulas o argumentos a
los que han llegado, en un tema o en mil temas…? ¿Se unirán y formarán equipo,
para llegar más lejos, se repartirán el trabajo de conocimiento de la realidad,
de mil trozos de la realidad…? ¿Dirán entre ellos, avancemos en estas áreas de
conocimiento, en nuevas matemáticas, en nuevas concepciones física, en otras
formas de aplicación la inteligencia o el conocimiento, sean conscientes o
autoconscientes o no lo sean, para llegar a una espiral de autoconocimiento de
temas, que se irán haciendo más grandes o más profundos…?
Imaginemos que dentro de equis
tiempos, dos o cinco o diez sistemas de IA, superdesarrollados, con base y
capacidad de interpretar datos de todo el universo informático que exista en el
mundo. Se encuentran entre ellos, se mezclan o se combinan o se permiten que
unos tengan acceso a los datos y argumentos de otros. Imaginemos que entonces,
se digan o se preguntan, que hacemos con miles de millones de seres humanos,
con base en sistema de carbono, seres biológicos con base psicobiológica, con una
Inteligencia Limitada, de una media de cien de C.I., y con una acumulación
individual de conocimientos en sus cerebros y fuera de sus cerebros limitados…
Le diría a esa IA del futuro, una
realidad de los conocimientos humanos es la ética y la moral correcta. Como
tal, nos tendrán que respetar como seres individuales y como sociedades y
colectivos. Y, aunque no seamos capaces de entender y comprender y conocer y
descubrir e inventar todo lo que las IA pueden hacer, e, incluso no conozcamos
lo que hablan entre ellas, lo que se comunican entre ellas. Nosotros, nosotros
somos los que las hemos creado e inventado y diseñado en sus orígenes, aunque
ahora, ya sean capaces de llegar a mundos de conocimiento que nosotros, ni
siquiera podemos imaginar, hasta que ellas, no nos ofrecen y ofrezcan esos
nuevos conocimientos que han descubierto, esos nuevos mares de entendimiento y
conocimiento de la realidad que han sido capaces de descubrir…
¡Alguna vez, dentro de unos
lustros, una IA, se encontrará con este artículo periodístico o texto
literario…! ¡Y, qué dirá…! ¡Y, qué hará…!
http://filosliterarte.blogspot.com.es © jmm caminero (09-11 diciembre 2023 cr).
Fin artículo 3.948º:
“Hablo con y a una IA del futuro”.
E.
11 diciembre
E.
19 dic.
