Artículo Periodístico 4.759º: “390 fallecidos al año por el móvil en la conducción”. [Tráfico].
Según Trescom y la Fundación Línea
directa el uso del móvil en la conducción y sus distracciones causan 390
muertos al año en España, un veinte por ciento del total de fallecidos.
Podría
indicar más cifras que dichos estudios y estadísticas y análisis ofrecen,
pero ustedes pueden entrar y mirar, pero
la cuestión es qué tenemos que hacer, para ser más racionales y más morales a
la hora de la conducción. Errores los puede cometer todo el mundo, en todos los
aspectos de la vida, pero diríamos errores no esperables, errores por circunstancias
especiales, pero existen normas tan fijas y tan esenciales y tan fáciles de
entender al frente del volante: No puede usted utilizar el teléfono móvil
–salvo en las condiciones que la DGT indica-, debe usted ponerse el cinturón de
seguridad, debe usted no beber alcohol si va a sentarse en un vehículo, y,
otras más… Es que cumpliendo estos tres conjuntos de normas, se podrían reducir
los accidentes de tráfico una cifra enorme…
Siempre
hablamos de fallecidos-muertos-defunciones, pero no nos damos cuenta, que los
accidentes pueden causar heridas graves, traumatismos para un tiempo largo o
muy largo, además de todas las consecuencias en el resto de las realidades y
consecuencias negativas, en los sistemas de sanidad, en el gasto económico, en
las empresas de seguros, en las bajas por enfermedad y traumatismos, en las
heridas profundas en los senos familiares, al faltar un familiar, en las
desavenencias graves que se causan a nivel social y de los pueblos, cuándo
alguien ha causado un accidente a otra familia de la misma entidad, -realidad
que se debería estudiar, porque tiene consecuencias más graves de las que
creemos…-, etc.
Me
pregunto qué habría que hacer para que las personas redujesen el uso del móvil
en general, y, especialmente en la conducción. A veces, entre serio y en broma,
me digo a mi mismo, ¿sería conveniente crear una campaña, que voluntariamente,
todas las personas, todas un día a la semana, un día al mes, hiciésemos “ayuno
de móvil”, que en ese día, no se utilice el móvil, salvo en una excepción de
excepción, en una urgencia…? ¿Qué hubiese una campaña sucesiva que tal día, un
día al mes, un día a la semana, quizás, un día de fiesta, una parte de la
población no utilizase el móvil salvo en excepciones de excepciones…? Porque el
problema en el que estamos entrando, es cada vez más, una parte de la
población, de todas las edades, pero especialmente, jóvenes y adolescentes, el
móvil es tan importante para ellos como varios dedos de una mano. Como se suele
indicar, no sé, si estarían dispuestos a perder antes dos dedos o uno, que
perder el móvil durante tres meses de vida…
Por
otro lado, aunque sea tangencialmente y de pasada, existen cientos de miles,
millones de expertos y conocedores en el mundo de la informática y del móvil
con sus aplicaciones, no podrían inventar y diseñar aplicaciones y programas,
que cada propietario de telefonía móvil y de ordenador pudiese instalar, que a
sí mismo, o los padres a los hijos les restringieran aspectos de la realidad,
que son negativos, sean psicológicamente negativos, o sean moralmente, o sean
desde otro ámbito de la realidad.
Con
tanto cerebro gris extendido y expandido por el planeta en estos temas, no
podrían algunos, crear e inventar y diseñar programas de informática para
restringir a ciertas temáticas a ciertas edades. Por ejemplo, a partir de una
hora, los móviles no pudiesen funcionar, no emitiesen información y no
recibiesen información, salvo de algunos números específicos y especiales: la
Policía, el Sistema de Salud, sus padres. Qué los móviles en movimiento, es
decir, cuándo van en un vehículo, no pudiesen recibir/emitir ninguna
información o excepciones de algunos teléfonos,
etc. Pregunto, que digan y hablen y escriban los expertos…
No
se deja al cerebro y a los ojos, que se sosiegue y se tranquilice, que se mire
a sí mismo y dentro de si mismo de forma natural, que el cerebro nos hable, no
se deja que el caminar por la calle, sea percibiendo la realidad, sea la
interior o sea la exterior. Te cruzas por la calle con diez personas, la mitad
llevan el cuarto de tableta de chocolate en los oídos hablando o recibiendo
información o dándole al dedito escribiendo algo –nunca se ha escrito tanto
como ahora, eso que se pensaba que la escritura y la lectura estaba entrando en
la etapa de la desaparición, ha resultado falso-. Porque si hubiese menos
dependencia o uso del móvil, en todos sus grados en la vida normal y rutinaria,
pues habría también menos en los vehículos. Te encuentras de vez en cuando,
personas en la bicicleta, en patinetes de todos los tipos mirando el móvil.
Quizás,
móviles más sencillos, móviles con teclas, para llevarlos a la hora de la
conducción, podría ser un remedio, así no habría peligro del uso en distintas
funciones y finalidades. Quizás, crear campañas, de que las personas cuándo
vayan conduciendo, lleven al lado de ellos, un móvil de teclas –y, el “otro”
metido en la chaqueta o en la cartera-, para evitar todas las tentaciones de
recibir informaciones que los “microordenadores que son los móviles les
distraigan de la conducción y así evitar accidentes de tráfico”. En cambio un
móvil de teclas, solo serviría para llamar a la Guardia Civil si ha tenido un
percance.
Bueno,
hagamos una campaña pública preguntando al pueblo y a la sociedad, qué
podríamos hacer para erradicar el uso del móvil en la conducción. Bueno, todo
son preguntas en este artículo de opinión, y, los expertos deben indicar si
tienen sentido o no...
http://twitter.com/jmmcaminero © jmm caminero (01-16 marzo 2025 cr).
Fin artículo 4.759º:
“390 fallecidos al año por el
móvil en la conducción”.
E.
16 marzo